Así lo afirmaron las Dra. Florencia Coronel y Marta Tarchini, en Libertad de Opinión al hablar sobre la situación del dengue en la provincia.
Florencia Coronel, jefa del área de inmunizaciones: “Epidemiológicamente, podemos decir que no hemos registrado casos positivos hasta finales de junio. Venimos controlando en laboratorio casos sospechosos y hasta el momento no hemos tenido casos positivos en Santiago, como sí los hay en las provincias cercanas como Córdoba, Tucumán, Formosa... Es por eso que estamos en alerta y vigilancia constante con todos los equipos”.
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Por su parte, la Dra. Marta Tarchini, directora del área de Atención Primaria de la Salud, aseguró que en Santiago del Estero aún no se ha tenido registro de un caso autóctono en lo que va del año. “Sí estamos vigilando activamente y hemos trabajado mucho en la capacitación tanto en la zona urbana, en los corredores rurales de Capital y Banda, como en el interior provincial con el fin de capacitar en la toma de la muestra, en hacer un diagnóstico y contener al paciente. También se ha hecho un intenso trabajo conjunto con los comisionados municipales e intendentes del resto de la provincia para poder armar una logística que nos permita atender como corresponde en el momento que se presente un brote, en el caso de que esto ocurra”.
“Si bien el clima no nos favorece, porque venimos teniendo altas temperaturas, muchas lluvias y grandes porcentajes de humedad, estamos atentos a la vigilancia de los posibles casos”, enfatizó.
También remarcó: “si bien desde los municipios se han realizado tareas de limpieza y descacharreos en los domicilios, es importante que después de cada lluvia recorrer el domicilio en busca de lugares en los que se haya podido acumular agua y que ésto no se convierta en un eventual criadero del mosquito transmisor del dengue”.
Respecto a una posible variante de la cepa del dengue, la Dra. Coronel aclaró que existen 4 serotipos de dengue (DENV1, DENV2, DENV3 y DENV4). “Durante el 2009 fue el primer brote de dengue que tuvimos. Allí podíamos observar la circulación de un serotipo de dengue. Más tarde comenzaron a circular los restantes, y ahí fue donde comenzó a variar un poco la sintomatología, pero siempre debemos estar atentos a los síntomas de siempre que son la fiebre superior a 38 grados, dolor muscular, dolor de cabeza, dolor abdominal y, en algunos casos del serotipo 1, producía también vómitos y diarrea, que no se veían en otras oportunidades”.
Al momento de hablar de la vacuna contra el dengue, Coronel definió que “el objetivo es prevenir la morbimortalidad, los casos graves y la mortalidad por dengue. Es por eso que desde la Comisión Nacional de Inmunizaciones se ha decidido vacunar al grupo que más se ha afectado, que son las personas de entre 15 y 39 años. También se ha priorizado el lugar en el que mayor incidencia histórica se ha tenido; en nuestro caso es el departamento Capital. Si bien no es una vacuna que figure en el calendario, por ende no es obligatoria, pero invitamos a todas las personas en este rango de edad, que se acerquen a un vacunatorio para aplicarse una dosis, porque hemos visto que la adherencia ha sido muy baja. Creíamos que la demanda iba a ser mucho más alta”.
Respecto al proceso de la enfermedad, la Dra. Tarchini, explicó que lleva de 7 a 10 días, pero muchas veces pueden quedar secuelas, por lo que es importante el control. “La fase aguda dura de 2 a 5 días y es en dónde se debe tomar la muestra. Los pacientes con comorbilidades deben ir al centro de salud más cercano para ser diagnosticado dentro del primer periodo de atención y poder hacer el seguimiento y tener la referencia y contrareferencia, si es necesario, en los niveles de mayor complejidad”.
“Es importante que la población entienda que más allá de hacer reposo y tomar líquido, cuando pasan la fiebre, muchas veces se relajan pensando que están saliendo de la enfermedad, cuando en realidad se puede estar atravesando los días más complicados, donde necesitamos reposo y descansar e ir al médico de cabecera para pedir algún control clínico o con un especialista, en el caso de ser necesario, como por ejemplo un diabetólogo o cardiólogo. Eso se debe hacer una vez que hemos pasado la etapa aguda de la enfermedad”, denfatizó Tarchini.