El dirigente del Polo Obrero se defendió de las acusaciones en su contra y cruzó al Gobierno.
Tras ser procesado por presunto fraude al Estado, el titular del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, se defendió de las acusaciones en su contra. “La causa está plagada de irregularidades”, afirmó el dirigente sindical en el programa Poco Correctos de Canal 13.
Ante la consulta de lo planteado en la causa, Belliboni aseguró que “rendimos el 97,3% de los recursos del Estado”. En la misma línea, añadió: “Hay construcciones en todo el país que hizo el Polo Obrero con ese dinero. No hay ninguna factura trucha presentada”. Y remarcó: “No hay ninguna prueba que complique mi situación”.
En el mismo sentido, Belliboni aclaró: “Estamos apelando este procesamiento que para nosotros es ilegal”. Y agregó: “Hemos presentado todas las pruebas de que no hemos defraudado al Estado. Incluso pedimos ampliar la indagatoria y el juez Casanello no permitió”.
En otro tramo de la entrevista, el dirigente del Polo Obrero hizo hincapié en la gestión de Alberto Fernández: “Tendrían que citar a funcionarios del gobierno anterior en la causa”. Luego, indicó que su presencia en la causa sería importante “para que expliquen por qué aceptaron una rendición que dice el juez Casanello que es trucha”.
“La ministra Bullrich ha mentido al decir que me procesaron por lavado de dinero”, manifestó Belliboni, al tiempo que chicaneó al Gobierno: “Los que van a tener denuncias de lavado de dinero son los que van a blanquear ahora”.
En la misma línea, el dirigente afirmó: “No pensábamos que el Gobierno iba a implementar un sistema de extorsión contra testigos para que declaren en contra nuestro”. Y señaló: “Las planillas de presentismo son para asegurarse de que todo el mundo vuelve de las movilizaciones. Y también teníamos listas de espera para comer”.
Por último, sentenció: ”A mí no me soltó la mano nadie, pero hay algunos que fueron funcionarios que se esconden abajo de la cama”.
La Justicia procesó este lunes al líder del Polo Obrero Eduardo Belliboni por el delito de administración fraudulenta en perjuicio del Estado Nacional al considerar que hay pruebas suficientes para demostrar que el líder piquetero desvió parte de los 360 millones de pesos que recibieron la asociación civil Polo Obrero y la cooperativa El Resplandor Limitado hacia una red de empresas que se habrían usado para justificar gastos inexistentes con facturas truchas y ocultar así el destino final del dinero. Además, el juez federal Sebastián Casanello le trabó un embargo de $390 millones.
El procesamiento también alcanza a otros 16 integrantes del Polo Obrero, acusados de extorsionar a beneficiarios de planes sociales. El Juez sostiene que para lograr este objetivo, el Polo Obrero utilizó una serie de empresas “truchas” para justificar la utilización de la plata que le deba Desarrollo Social en el marco del programa Potenciar Trabajo. Estas firmas son la imprenta Rumbos, Coxtex, Ricoprint y Carlos Osvaldo Monfrini, proveedor de handies.