Las fuerzas de seguridad fueron contra los visitantes tras la eliminación ante Altos Hornos Zapla.
La eliminación de Talleres de Perico ante Altos Hornos Zapla en el Torneo Regional Federal Amateur terminó en graves incidentes en el Estadio Emilio Fabrizzi de Palpalá. La policía jujeña reprimió con balas de goma a jugadores, hinchas y miembros de la delegación visitante tras la derrota 2-1 en la vuelta de los octavos de final.
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Todo comenzó con un intercambio de insultos y provocaciones entre futbolistas de Talleres y un grupo reducido de hinchas locales. Sin embargo, la situación se desbordó rápidamente y obligó a la intervención de las fuerzas de seguridad, que, según muestran varios videos difundidos en redes sociales, forzaron el ingreso al vestuario visitante y efectuaron disparos con balas de goma.
Como consecuencia de la represión, varios integrantes del equipo dirigido por Federico Acuña resultaron heridos, incluyendo al masajista Sebastián Cuevas, quien debió ser hospitalizado por las lesiones sufridas. El propio entrenador se mostró visiblemente afectado por los disparos en medio del caos. A pesar de lo ocurrido, no se presentaron denuncias formales hasta el momento.
Talleres de Perico emitió un comunicado repudiando lo sucedido y solicitando explicaciones por el accionar de la policía. Por su parte, las autoridades de Altos Hornos Zapla se pusieron a disposición para asistir a los jugadores y dirigentes heridos.
Se espera que en las próximas horas las fuerzas policiales responsables del operativo brinden un informe oficial sobre lo sucedido. Además, el Consejo Federal de AFA, encargado de la organización del torneo, podría aplicar sanciones a los clubes involucrados y a los responsables del operativo.