Los futbolistas del Millo fueron a buscar tras el partido al delantero colombiano, quien hizo gestos luego del segundo gol de su equipo.
River cayó sobre la hora ante Independiente Rivadavia y el encuentro terminó de manera bochornosa luego de que una cargada de Sebastián Villa desatara la ira del plantel Millonario, lo que provocó una gran pelea entre los planteles donde volaron golpes de puño y hubo corridas adentro y afuera del campo de juego.
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El atacante colombiano realizó una gran jugada individual que permitió a Ezequiel Ham empujar la pelota abajo del arco para darle el triunfo a la Lepra, aunque el accionar posterior del ex-Boca fue lo que causó el estallido de los jugadores del elenco riverplatense. Una cargada ante el banco de suplentes no pasó desapercibida y generó una gresca que rápidamente fue disipada para que el Millonario pueda sacar del medio.
Arasa dio la orden y al instante marcó el final del juego, lo cual trajo consigo la búsqueda de los jugadores de River para increpar a Villa, quien salió corriendo a la zona del vestuario mientras los dos planteles se veían sumergidos en una fuerte bataola.
Como Villa dejó rápidamente el campo de juego para dirigirse al vestuario, varios de los jugadores del Millonario le siguieron y el escándalo se trasladó a la zona que separa los cambiadores de los planteles.
Afortunadamente la situación no pasó a mayores, aunque las cámaras lograron capturar el momento en el que Diego Moreno, guardaespaldas encargado de la seguridad del plantel del Millonario, recibe un artero golpe de puño en el rostro por parte de Ramiro Loguercio, uno de los preparadores físicos del plantel.