Termas. Alrededor de 70 integrantes de la Iglesia de la Ciudad realizaban una campaña de concientización sobre abuso sexual. Vecinos se organizaron por WhatsApp y los atacaron.
Este miércoles 11 la Policía de Termas de Río Hondo tuvo una intensa jornada de trabajo, que involucró a las comisarías 40, 50, 57, División Prevención y otras divisiones de la Departamental 6.
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Durante la mañana alrededor de 70 personas integrantes de la Iglesia de la Ciudad, de la provincia de Chaco, se distribuyeron entre los diferentes barrios de la ciudad termal para llevar adelante una campaña de concientización sobre abuso sexual infantil.
En pocas palabras llegaban a los domicilios, preguntaban si había niños y entregaban libros donde de manera didáctica se explicaba los cuidados a tener. La consulta sobre las edades de los mismos era para saber a qué grupos apuntar, ya que si había mayores de 9 años se les dejaba libros donde les indicaban tener cuidado con los contactos a través de las redes sociales e internet en general.
Llamados a la policía y grupos de WhatsApp
Mientras se realizaban estas visitaslos vecinos comenzaron a llamar a la policía alertando sobre “la presencia de personas con tonada foránea y en actitud sospechosa preguntando por chicos”.
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Los llamados se repetían en las diferentes comisarías.
Ante esta situación el personal policial concurrió a cada uno de estos barrios y allí procedieron a identificar a estos “extraños en actitud sospechosa”.
En todos los casos tanto las personas como los vehículos en los que circulaban se encontraban “sin novedad” dentro del registro judicial. Es decir personas sin antecedentes, sin pedidos pendientes en la justicia y los vehículos sin ningún impedimento para circular. Inclusive se consultó sobre la iglesia a la que decían pertenecer, la cual se encuentra habilitada por la Nación y llevaba muchos años en funcionamiento.
Grupos de WhatsApp y redes sociales
Mientras la policía hacia su trabajo y dejaba constancia que las personas denunciadas como sospechosas no tenían impedimento para realizar su labor evangelizadora y de prevención, los vecinos comenzaron a organizarse en los grupos de WhatsApp, indicando que “extraños andaban buscando chicos para secuestrar”.
Violencia
De un instante a otro la situación con los visitantes cambió.
De atenderlos en la vereda y escucharlos, comenzaron a agredirlos. Incluso a un joven se le llegó a robar las zapatillas y el celular.
A tal grado llegó la violencia que enVilla Nueva dos mujeres debieron buscar refugio en un negocio, ya que al menos 50 personas las habían rodeado y eran hostigadas.
Libros que eran entregados a las familias
En otro de los barrios los integrantes de la Iglesia de la Ciudad debieron ser sacadas en móviles policiales, porque sufrieron agresiones físicas, hechos que quedaron registrados en decenas de videos grabados por los propios vecinos y que se replicaban en los grupos de WhatsApp.
Escolta
Finalmente la persona a cargo del grupo y autoridades policiales, quienes en todo momento trataron de brindarles seguridad, convinieron en que lo mejor era retirarse por lo que fueron escoltados por ruta 333 hasta el límite con Tucumán en horas de la tarde, porque allí se habían establecido para realizar su trabajo en ambas provincias.