El jugador que fue medalla de oro con la Selección Argentina y ahora representa a la alemana, desató la polémica tras su gol.
Gonzalo Peillat se robó todas las miradas en el partido que Alemania le ganó 3-2 a Los Leones por los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de París 2024. El jugador, que había ganado el oro con la camiseta albiceleste en 2016 y actualmente juega para el conjunto europeo, celebró el gol que le marcó a su ex equipo.
Nadie se esperaba la reacción que tuvo el defensor al festejar el gol que le marcó al seleccionado argentino con la camiseta de Alemania: al decretar el 2-1, saltó y gritó con todo. Además, cerró, el puño y lo agitó en el aire.
Esta actitud sorprendió, debido no solo a que Peillat es argentino de nacimiento, sino a que por muchos años fue parte del conjunto albiceleste y hasta se subió a lo más alto de un podio olímpico con Los Leones.
Tres años después de la consagración de Los Leones en Rio 2016, Peillat decidió dar un paso al costado. La designación de Retegui como head coach de los seleccionados nacionales y su continuidad al frente al equipo masculino, desembocaron en la carta en la que el jugador contó los motivos por los que renunciaba.
"Sin saber si esto estuvo planeado o fue el resultado de un manejo político, Retegui sin ninguna explicación vuelve con una doble función, la cual demanda mucho más trabajo, energía y tiempo. Motivo por el cual él había renunciado al mismo cargo cinco semanas atrás", expresaba Peillat, en un duro comunicado.
"Nuestro paso al costado (también había renunciado Agustín Mazzilli, quien hoy integra el plantel de Los Leones en París) es porque nos traicionaron, nos mintieron en la cara, nos faltaron el respeto y nos dejaron expuestos ante una situación inmanejable", agregó.
Retegui había renunciado a Los Leones porque su idea en ese momento era comenzar su carrera en el fútbol y ya estaba trabajando con Carlos Tevez (estuvieron cerca de llegar juntos a Rosario Central, pero se separaron de manera conflictiva). Sin embargo, volvió poco tiempo después y desencadenó el alejamiento de Peillat. Chapa explicó que la decisión de regresar a Los Leones fue por pedido del capitán Pedro Ibarra para preparar la Copa del Mundo porque no tenían entrenador. “Si no me hubiesen llamado, había mantenido mi postura”, expresaba en ese momento.
A partir de esa situación, Peillat no volvió a jugar más en la Selección Argentina más allá de que él mismo afirmó que mantenía la esperanza; sin embargo, a la distancia veía que las cosas que lo habían alejado, no se modificaban. Mientras tanto, recibió el llamado que conmovió al hockey argentino.
En 2016, el surgido en Mitre llegó a la Bundesliga para jugar en el Mannheimer y fue a fines de 2020 cuando le manifestaron si quería jugar para la selección de Alemania, a la que le había convertido tres goles en la semifinal de Río 2016.
Al Saadi Kais, entrenador del representativo alemán, lo contactó y lo primero que pensó Peillat fue que era para practicar córner corto (especialista) porque se estaban preparando para los Juegos de Tokio y solían usar las instalaciones del club. Pero era para algo más importante…
Peillat contó que le costó un año decidirse a jugar para otra selección que no fuera la Argentina, hasta que a principio de 2022 le entregaron el pasaporte alemán y tuvo su presentación en marzo en la Pro League.
“Yo no le tengo que devolver la medalla a nadie si la gané. Hoy por mil cosas tengo que tomar otra decisión en mi carrera y en mi vida y no por eso voy a decir ‘dejo de ser argentino’. Sigo siendo argentino. Nací en Argentina y soy argentino, al que le guste bien y al que no le guste que se enoje. No sé, tendrá dos problemas en ese caso: enojarse y desenojarse, simple”, expresó en una entrevista con ESPN en la previa del debut con Alemania y como respuesta a algunas críticas que recibía.
En 2014, Peillat fue elegido el mejor jugador joven del mundo y ganó la medalla de bronce en el Mundial de La Haya; al año siguiente integró el plantel de Los Leones que fueron campeones en los Juegos Panamericanos de Toronto y el cierre de ese ciclo histórico fue con la medalla dorada en Río. En total, con la camiseta argentina jugó 153 partidos y convirtió 176 goles. Ahora, Los Leones deberán cuidarse de sus cortos.