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Septiembre de 2024
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Brasil, México y Colombia impulsan una mediación entre Nicolás Maduro y González Urrutia

Lula Da Silva prevé hablar con el presidente bolivariano para promover un diálogo entre las partes. Preparan un viaje de cancilleres a Caracas. El país está atravesado por manifestaciones que denuncian fraude en las elecciones.

04/08/2024

Brasil, México y Colombia impulsan una negociación directa entre el presidente Nicolás Maduro y Edmundo González Urrutia, sin la presencia de la líder opositora María Corina Machado. Las eventuales tratativas incluirían el viaje a Caracas de los cancilleres de los tres países que mantienen aceitados vínculos con el chavismo.

Según el diario OGlobo, el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, planea mantener una conversación telefónica con Maduro para sentar las bases de un diálogo con la oposición. La fecha de la llamada aún no fue definida por ambos gobiernos.

Lula y sus pares de México, Andrés Manuel López Obrador, y de Colombia, Gustavo Petro, se han estado moviendo en bloque frente a la crisis desatada en Venezuela tras las contestadas elecciones presidenciales del domingo 28 de julio. Los tres mandatarios de izquierda no refrendaron la victoria de Maduro, en medio de denuncias de fraude de la oposición, pero tampoco la desconocieron, como sí hicieron otros gobiernos de la región, como el de Javier Milei. Además, en un comunicado conjunto, pidieron a Caracas que publique los “datos desglosados por mesa de votación”.

La posición de Lula, Petro y López Obrador fue compartida este sábado por la expresidenta Cristina Kirchner en un encuentro sobre la realidad política y electoral latinoamericana organizado por el Instituto Nacional de Formación Política de Morena (INFP) en México. Sin embargo, la exmandataria no forma parte de esta táctica mediadora. La idea es darle un carácter oficial a las conversaciones.

La región quedó dividida tras las elecciones presidenciales. Estados Unidos, Argentina, Chile, Perú, Paraguay y Uruguay no reconocieron el triunfo de Maduro. En la vereda de enfrente, Cuba, Nicaragua, Honduras y Bolivia felicitaron al presidente venezolano sin cuestionamientos. En el medio quedaron Colombia, Brasil y México, que pidieron evitar injerencias extranjeras sin reconocer ni rechazar el resultado oficial. Maduro ganó con más del 51% de los votos, contra casi el 44% de González Urrutia, según el conteo oficial del Consejo Nacional Electoral, que jamás entregó las actas correspondientes que avalen el resultado.

La oposición, que presentó sus propias actas, afirma que ganó con una diferencia de 40 puntos.

En la OEA, Maduro obtuvo un triunfo diplomático cuando una mayoría de países caribeños, que dependen mayormente del petróleo venezolano, se abstuvo sobre una resolución que exigía a Venezuela publicar las actas electorales. El llamado contó con 17 votos a favor (necesitaba 18) y 11 abstenciones, entre ellas las de Brasil, México y Colombia.

De esa manera, Brasilia, Bogotá y Ciudad de México mantuvieron abierta una puerta de negociación con Caracas.

Incluso, el viernes pasado, Lula, Petro y López Obrador mantuvieron una extensa conversación tripartida vía Zoom para analizar la crisis venezolana. Tras el diálogo, emitieron el comunicado conjunto, consensuado y medido bajo los preceptos diplomáticos, para mantener un canal de comunicación con ambas partes. Incluso, el diario El Colombiano aseguró que Petro mantuvo conversaciones con funcionarios estadounidenses sobre la crisis.