"Tengo una vida tocada por una varita mágica, siempre he tenido muchísima suerte"

Romina Leal es una modelo santiagueña que luego de caminar por varias pasarelas en su provincia decidió extenderse hasta Buenos Aires y unos años más hacerlo hasta Estados Unidos. Desde que llegó no ha parado de trabajar para concretar sus planes. Ha ido diseñado proyectos nuevos, conforme adquiría diversos aprendizajes y capacitaciones. Se ha perfeccionado en actuación, conducción, locución y hasta en doblaje de voces. Todo lo ha implementado en proyectos que se han materializado de diferentes maneras y en diversos medios.

Inquieta y trabajadora, Romina ha sabido convertir hasta sus pasatiempos y hábitos de vida, como por ejemplo la alimentación saludable y el yoga, en contenidos que difunde a través de redes sociales.

Optimista, enérgica, inquieta, curiosa y emprendedora, esta hermosa morocha santiagueña ha sabido abrirse camino en un terreno ajeno, con adversidades que ha sabido convertir en oportunidades. Su presente es una cabal muestra de lo que resulta cuando se elige en base a la pasión y al amor, asegura ella.

La charla telefónica la hizo desde su aislamiento obligatorio, en la casa familiar de su marido en La Plata, luego de dar positivo en un testeo de Covid-19. Tan inquebrantable es su optimismo que ni la noticia de haberse contagiado deja de ser una oportunidad para el bienestar. “Di positivo en un hisopado que me hice hace unos días, pero me siento súper bien. Solamente tengo síntomas de un resfrío leve. Me siento llena de energía”, contó y dijo que el aislamiento que debe cumplir por unos días se lo toma como una oportunidad para descansar. “La verdad que hace meses no paro haciendo cosas, trabajando, ni siquiera durante la cuarentena he parado de trabajar, de tomar cursos, idear proyectos; inclusive estas últimas semanas que vinimos de vacaciones con mi marido no hemos parado de viajar, de andar con las familias... la verdad que quedarme unos días en la casa va a ser una oportunidad para sacar el pie del acelerador y descansar unos días”, relató Romina, quien no le ve el lado negativo ni al coronavirus.

Una breve vuelta al modelaje

Romina Leal se encuentra en Argentina desde Diciembre. Vinieron con su novio a pasar las fiestas y vacacionar por distintas provincias, además de cumplir con algunos pequeños compromisos laborales de su marido, quien es un conocido DJ y productor musical de La Plata.

“Fuimos a Santiago a ver a mi familia porque el año pasado me ha hecho falta más que nunca el afecto de ellos. He extrañado muchísimo a mis amigos y familiares”, comentó Romina, remarcando a su amigo, el manager José Antonio, por quien guarda un afecto muy especial, dado que fue quien la inició en el mundo de la moda, en su agencia Look Models.

“Charlando y tomando un café con José surgió la idea de hacer una buena producción de fotos a modo de romper el hielo de la cuarentena juntos. Así que nos pusimos manos a la obra y en cuestión de dos días teníamos todo listo. José consiguió el lugar y las personas que integraron la producción”, contó Romi sobre la sesión de fotos que realizaron conjuntamente.

“Fue una gran producción, a la altura de producciones internacionales. Es así como trabaja José siempre”, resaltó Romina sobre su breve vuelta al modelaje en su provincia, dado que desde hace unos años está más abocada a la conducción televisiva y a la actuación. Siempre delante de una cámara.

“Mi lugar es y fue siempre delante de una cámara, es en donde más cómoda me siento”, aseguró. “Me gusta el juego de posar. Es como actuar, ponerle el cuerpo y la cara a un personaje. Es algo que se me da de manera natural”, indicó sobre la producción realizada en Santiago, la que destacó como un gran momento por la comodidad y fluidez que se dio entre los involucrados en la misma, todos profesionales santiagueños de gran nivel, como lo es el caso con Vale Tovillino en maquillaje; Viviana Cabrera, encargada de la parte del peinado, los diseños de los vestidos pertenecen a Luis Guerra y a Javier Guerra el arte de las fotografías. Los calzados pertenecen a Compulsiva Zapatos.

Elegir con el corazón

Hace unos años Romina se fue de vacaciones con amigas a Miami, donde conoció a Leo Medina. Según contó, el amor surgió instantáneamente, tanto que de ese viaje surgió la posibilidad de irse a vivir a Estados Unidos, porque él ya residía ahí hace un tiempo. Romina tenía la posibilidad de ir a vivir a México a raíz de unas posibilidades laborales, pero decidió cambiar todo. “El corazón me empujaba a ir a Estados Unidos con Leo. Allá no tenía nada ni a nadie, sólo a él. Pero le hice caso a mi corazón y tomé esa decisión”, relató agregando que “yo soy así, decido con el corazón. Por eso me va bien en todo lo que hago”. Es así que hace cuatro años fue a vivir a Miami, pero hace dos que se mudaron a Los Ángeles, California.

Romina y Leo.

Una vez allá, comenzó en la búsqueda de trabajo. Hizo muchos casting de modelaje y de publicidad, pero paralelamente comenzó con diferentes cursos y especializaciones. En Buenos Aires había estudiado en la academia de Julio Boca, lo que también la había acercado al mundo de la actuación. Entonces comenzó a poner sus conocimientos en escena y arrancó su carrera en el mundo televisivo. Trabajó como presentadora y conductora en diferentes programas de televisión y actuando en series televisivas, una manera más de afianzar su pensamiento de que su lugar es siempre delante de una cámara.

El amor y el trabajo en tiempos de cuarentena

Algo que acompaña a ese exceso de energía y optimismo en Romina, es la versatilidad y la capacidad de adaptación. Eso quedó demostrado en lo que fue todo el periodo de cuarentena que se decretó a nivel mundial durante el 2020 a causa de la pandemia del coronavirus.

Tal como le pasó a todo el mundo, casi la totalidad de las actividades laborales se detuvieron de un día para el otro, pero la necesidad de seguir trabajando se mantuvo.

“Hay que reinventarse” escuchamos infinitamente durante todo el 2020. Romina Leal lo cumplió y lo demostró de muchas formas. Dados los trabajos de ambos, ligados estrechamente al mundo artístico y a la exposición, Romina contó que su casa de Los Ángeles fue convirtiéndose poco a poco en un mini estudio de televisión y grabación. El hogar se convirtió en el lugar de trabajo para ambos. “Fuimos comprando luces, paneles, cámaras, micrófonos... muchas herramientas para el trabajo nuestro. De esta manera pudimos seguir trabajando desde nuestra casa. Leo se dedico a grabar y producir música desde casa y yo produje contenido para mi canal de YouTube”.

“Allá fue súper estricto el encierro, llevamos los cuidados al extremo. Estuvimos encerrados desde marzo. Por momentos se tornó un poco difícil, pero la modalidad home office comenzó a ser cada vez más común. Surgieron muchos proyectos en ese momento. Pero al cabo de 7 meses decidimos salir, cumpliendo con todos los recaudos, pero necesitábamos salir y llevar a cabo los proyectos que teníamos”, continuó relatando.

“Uno de los proyectos que más me entusiasmaba de cumplir fue uno que lo hice desde el fondo de mi corazón, como una muestra de amor a mí marido. Por primera vez trabajé como productora. Como él es DJ pero aún no abrían los boliches, decidimos grabar live set de él en diferentes puntos, tenían que ser lugares con paisajes muy hermosos. Fue así que grabamos videos en 5 ciudades. Tuvimos que alquilar una van totalmente equipada con lo que necesitábamos y salimos a grabar” contó sobre los videos que hoy en día están siendo editados y saldrán a la luz pronto a través de una plataforma digital. Al regresar a Estados Unidos, continuarán con el mismo proyecto pero en lugares nuevos, de la costa oeste.

Dj Leo Medina

Otra muestra de esa versatilidad fue la incursión en el doblaje. Si bien tenía una base de conocimientos en actuación y en el uso de la voz, esta vez tuvo que unir los talentos para darle vida a personajes que formaban parte de unos unos podcast científicos para niños. Los mismos tienen el propósito de enseñar de manera didáctica temas que representen alguna complicación para su entendimiento desde una visión científica. Dicho material se encuentra disponible en redes sociales y diversas plataformas de streaming.

Esta multifacética morocha santiagueña también ha incursionado en el mundo de las redes sociales, como instagram y YouTube. Tiene un canal personal en que comparte vlogs sobre diferentes temáticas relacionadas a su vida en el país del norte o bien temas que surgen de la interacción con sus seguidores.

Junto a su esposo Leo Medina (@djleomedina), Romina (@RomitaLeal) llevan adelante la cuenta Tea Lime Vibes, canal que desde hace un tiempo utilizan para la difusión de temas relacionados al bienestar personal, com alimentación saludable, meditación, reflexión y yoga.

En un futuro cercano, este proyecto anunciará formalmente un emprendimiento ligado a la nutrición que será la presentación de productos veganos como el dulce de leche y el helado.

Tea Lime Vibes es un proyecto que surge también desde que Romina cumplió con sus estudios en la escuela de sommelier de te, donde aprendió, entre otras tantas cosas, la importancia de vivir en la sintonía de la mente, el espíritu y el cuerpo.

Otro de los proyectos que la espera a su regreso a Los Ángeles es la grabación de un piloto de una serie llamada “No Me Puedo Enamorar”, de Memo Zurita, director cubano radicado en Miami. “Es una historia muy shakespeareana. Tiene drama, sensualidad, enfrentamientos, asesinatos, etc.”, adelantó Leal.

Romina junto a Nathan Roman, actor puertorriqueño, novio en la historia de Studio 786.

Discriminación y preconceptos

Que en Estados Unidos discriminan o menosprecian a los latinoamericanos no es ninguna novedad. Como a muchas otros, Romina Leal tuvo que pasar por esta desagradable experiencia. Contó que durante sus primeros tiempos allá, fue a audicionar un casting de actores. Había muchísima gente y atendían por número de llegada. “Yo tenía el número 23. Cuando estaba cerca, noto que comienzan a llamar a los del 30 en adelante. Pasaron las horas, pasaron los actores, cerca de 90 tal vez y comenzó a hacerse tarde. Yo estaba charlando con un grupo de chicos de mi edad, ellos eran de Colombia, de El Salvador y de República Dominicana. Sólo a modo de broma les dije 'nos están discriminando por latinos´, a lo que ellos contestaron con seriedad ´claramente nos están discriminado´. Se notaba que no era la primera vez que les pasaba. A mí sí. Ahí me di cuenta lo horrible que es que te prejuzguen y te nieguen una posibilidad para algo sin si quiera conocerte.”, relató.

Lejos de entristecerse o actuar en base al enojo, Romina aseguró que esa vez dio “el mejor casting de su vida”.

“Siembre va a haber gente que no le va a gustar el trabajo de uno o, en el peor de los casos, te van a prejuzgar. Pero ese tipo de personas son las que tienen que salir de la ignorancia. Es gente poco evolucionada, primitiva, que lo único que logran es atrasar”, reflexionó sobre este flagelo social que lo tocó vivir.

“Todo va a depender de cómo uno se toma cada una de esas cosas. Yo soy una persona que no me dejo caer pese a las negativas que me puedan tirar. Tengo una vida tocada por una varita mágica. Siempre he sido una persona de muchísima suerte”, aseguró con la voz llena de orgullo y fortaleza.