Una investigación de The New York Times encontró que más de 20 mil sitios para adultos son rastreados.
Los gigantes de Silicon Valley no tienen ningún reparo a la hora de recolectar datos de los usuarios, y en las últimas semanas se confirmó que sobrepasaron todos los límites, al confirmarse que también espían qué sitios pornográficos visitan los usuarios.
De acuerdo a una investigación de The New York Times basas en el documento New Media & Society, que analizó 22,484 sitios web de pornografía, el software encargado de rastrear los datos de navegación de Facebook y Google colecciona información personal de los usuarios, incluso cuando están navegando en modo de incógnito.
Los autores del informe, Jennifer Henrichsen, candidata a doctorado en la Universidad de Pensilvania, y Tim Libert, un instructor de ciencias computacionales de Carnegie Mellon, encontraron que el 93 por ciento de los sitios web de pornografía que escanearon enviaron datos a un promedio de siete dominios de terceros.
Con la ayuda de webXray, un software de código abierto que detecta y empareja solicitudes de datos de terceros para escanear sitios, los investigadores concluyeron que la mayor parte de esa información (el 79 por ciento de los sitios web que transmitieron datos de usuarios) se envió a través de cookies de seguimiento de empresas externas.
Cómo espían a los usuarios Facebook y Google
A pesar de lo que puede creer el usuario promedio, el seguimiento de softwares de rastreo (conocidos popularmente como robots) varía alrededor de la web. Con frecuencia se realiza a través de cookies, que son fragmentos de texto descargados por el navegador web cuando visita un sitio.
Otras veces, los rastreadores (Facebook Pixel) vienen en incrustados invisibles en su pantalla. En la mayoría de los casos, estos rastreadores ayudan a los sitios a identificar y clasificar a los visitantes frecuentes. También pueden servir como ayuda para mantenerse conectado a un sitio, registrar sus preferencias y administrar sus perfiles de publicidad.
Algunos rastreadores, como los de Google Analytics, proporcionan datos de tráfico -cantidad de usuarios usuarios únicos, páginas vistas, entre otros- al sitio. DoubleClick y otros proporcionan la infraestructura para ejecutar publicidad.
El estudio encontró que Google (o una de sus compañías subsidiarias, como la plataforma de publicidad DoubleClick) tenía rastreadores en el 74 por ciento de los sitios de pornografía. Los rastreadores de la compañía de software Oracle aparecieron en el 24 por ciento de los sitios, y Facebook, que no permite contenido pornográfico ni desnudos en ninguna de sus plataformas, tenía rastreadores en el 10 por ciento de los sitios web de sexo analizados por el estudio.
Asimismo, el estudio descubrió que solo el 17 por ciento de los 22,484 sitios escaneados que ofrecen pornografía estaban encriptados, lo que sugiere que una gran cantidad de datos de los visitantes incluso podrían ser vulnerables a piratería o violaciones.
Lo que resulta un absoluto misterio es la finalidad que pueden ambas compañías a los datos de navegación que recogidos de los sitios de pornografía. En los casos de Google y Facebook, que se niegan a alojar contenido sexual pornográfico en varias de sus plataformas, no queda claro por qué están recopilando información tan sensible, aunque sea de manera no intencionada.
Por su parte, según refleja The New York Times, Facebook y Google negaron que la información potencial recopilada por sus rastreadores en sitios web se utilizara para crear perfiles de marketing destinados a publicitar a personas.