El ex contador de los Kirchner fue incluido en el programa de protección de testigos y habría dado a conocer cómo salieron los fondos de Santa Cruz.
El ex contador de los Kirchner, Víctor Manzanares, volvió esta mañana a los tribunales federales de Comodoro Py para ampliar su declaración ante los fiscales de la causa de los cuadernos en su intención de convertirse en el nuevo arrepentido del expediente.
Manzanares se encuentra incluido en el programa de testigos protegidos y días atrás alcanzó un acuerdo de colaboración con los fiscales Carlos Rívolo y Carlos Stornelli, pero ese trato todavía no fue homologado por el juez de la causa, Claudio Bonadio.
Fuentes judiciales sostuvieron que en sus declaraciones anteriores Manzanares relató cómo se desarrollaron las maniobras de lavado de dinero que tuvieron como protagonista al fallecido secretario presidencial, Daniel Muñoz, y detalló que el dinero movido supero ampliamente los 70 millones de dólares detectados por la Justicia.
Aunque su declaración aún no forma parte del expediente de la causa de los cuadernos, porque no fue homologada por el juez Bonadio, trascendió que Manzanares mencionó que el ex juez Norberto Oyarbide manipuló las pericias realizadas en la cerrada causa por enriquecimiento ilícito contra el matrimonio Kirchner.
El contador también aportó datos sobre cómo fue la operatoria diaria de Hotesur, la sociedad controlante del hotel Alto Calafate, donde Lázaro Báez alquiló cientos de habitaciones y salones cada mes durante años, sin utilizarlos, en una presunta maniobra de lavado revelada en 2013.