Anegamientos de calles de la ciudad, casas inundadas, campos bajo el agua, rutas cortadas y familias evacuadas son algunos de los daños causados por las torrenciales lluvias de los últimos días.
Desde la semana pasada que Santiago del Estero está siendo víctima del una seguidilla de lluvias torrenciales en casi todo el territorio provincial. Éstas provocaron todo tipo de problemas y complicaciones, de diversa gravedad.
Primero fue el sudeste provincial el más afectado, entre otras zonas, ciudades y localidades de todo el interior santiagueño, incluidas las principales como Capital y La Banda. Ahora el daño se extiende hacia el norte de la franja este, en sus límites con las provincias del Chaco y Santa Fe.
Estas precipitaciones marcaron inusuales milimetrajes; por ejemplo, sólo en Tintina se registraron 250 milímetros de agua caída.
Las zonas rurales de Añatuya, El Colorado, El Cuadrado, Roversi y Los Juríes han quedado bajo el agua en varias oportunidades y mantienen el alerta por la probabilidad de la continuidad de las precipitaciones.
Tal es la preocupación por los daños sufridos que desde el comité de emergencia se está trabajando intensamente para asistir a los afectados y llevar a cabo tareas preventivas en caso de nuevas lluvias.