Recién comienza el año y lejos de estar renovada, la artista está pidiendo a gritos un descanso. Se había comprometido a ser parte de una obra teatral, pero a último momento se bajó. ¿Qué pasó?
Es una de las figuras del momento. De un tiempo a esta parte, Laurita Fernández logró instalarse como única en su especie. Las marcas, los programas televisivos y obras teatrales hacen fila para contratar sus servicios. A tal punto, que en enero, El Trece y Telefe, dos de los canales líderes, se tiraron de los pelos por ella. Mientras ella era panelista de Los ángeles de la mañana, la llamaron de Morfi, todos a la mesa para tentarla.
Intentando acaparar lo mayor cantidad de proyectos posible, la bailarina escucha y se hace un tiempo para todos. Tiene el oficio para acomodar su agenda, los horarios y cumplir con todos. Sin embargo, llega un momento en que esto se hace difícil de llevar adelante y la rubia lo está sufriendo en carne propia.
Había sido contratada para hacer algunas participaciones especiales en Noche corta y si bien de antemano había aceptado, el estar saturada de trabajo, hizo que Fernández se bajara de la pieza teatral. Argumentó su situación, pidió disculpas y quedó en buenos términos con los encargados del espectáculo.
El mayor inconveniente que se le presentaba era poder acudir a los ensayos. Los fines de semana, Laurita está llevando adelante la conducción de Combate, el reality de Canal 9. Sin embargo, lo que más tiempo le demanda, es la grabación de Quiero vivir a tu lado, la tira de Pol-Ka. A esto se le suman las publicidades, con una en particular, que le demandará viajar al exterior para realizarla.