La modelo estuvo invitada al sketch “La empleada pública” y abrió las puertas de su intimidad con el economista: "Soy re juguetona".
Una Luciana Salazar divertida y auténtica estuvo invitada al sketch del programa de Susana Giménez, La empleada pública, y deslumbró con un vestido muy sexy que dejaba ver su privilegiada figura. Con mucho humor, se sometió a las picantes preguntas del personaje de Antonio Gasalla y no tuvo problemas a la hora de hablar de la intimidad con su novio, Martín Redrado.
"Somos recontra pasionales", confesó Salazar. Al ser consultada sobre la frecuencia con la que tienen relaciones, dijo que no lleva la cuenta, pero que depende de cada semana. Y admitió: "Hacemos muchos matutinos. A veces con ropa pero a él le gusta sin ropa. Yo me gasto comprando cosas divinas y sexy pero después él te quiere ver sin nada, desnuda".
En ese sentido, contó que es "re juguetona" y que le gusta ponerse disfraces y usar cremas en la intimidad: "Me divierte, en ese sentido somos divertidos. Un delantal, sin nada. Y algo para jugar, algún pomito de crema, o en aerosol. La crema te la podés poner donde quieras, es comestible".
Susana le consultó sobre el episodio a bordo de un avión que tuvo a la pareja como protagonista: un pasajero los filmó mientras se mostraban muy cariñosos. Ella le restó importancia a lo sucedido y recordó una vieja historia: "En un viaje a Francia estábamos solos en la cabina y dio para todo. No sé si pasó justo una azafata, estábamos con la mantita. Me gusta pasarme al asiento de mi pareja (en los vuelos). Como que voy antes de irnos a dormir
Además, le consultaron sobre la relación que tuvo Redrado con Amalia Granata durante un impasse que hubo en su pareja, y ella respondió: "No hubo cuernos en esta relación. Ella no fue una tercera en discordia".