El diluvio desatado durante Navidad y que afectó a decenas de familias en Otumpa (dpto. Moreno) dejó al descubierto una profunda grieta de unos 3 km de longitud y que causó daños en las estructuras de casas y ranchos.
Preocupación y sorpresa. Esos son las sensaciones que provoca la aparición de una profunda grieta que “divide” al pueblo en dos.
Según explicaron vecinos del lugar, la grieta se hizo visible luego del aguacero que castigó la zona la madrugada del 25 de diciembre pasado, donde se precipitaron más de 200 mm en un corto período de tiempo.
La lluvia provocó daños en viviendas rurales y precarias construcciones por lo que varias familias tuvieron que ser asistidas por el gobierno de la Provincia y organizaciones como Cáritas de Añatuya.
Precisamente, voluntarios de esa ONG enviaron las fotos que ilustran esta nota y que fueron tomas cuando llevaban ayuda a las familias afectadas por el temporal.
Relataron que la grieta se extiende por lo menos por 3 km hasta internarse en el monte donde se presume continúa. Los pobladores no creen que el origen de la misma haya sido la tormenta sino que especulan con algún movimiento sísmico previo que provocó la separación de la tierra y que la lluvia “lavó” hasta dejarla al descubierto.