Las aplicaciones de las células madre en la lucha contra las enfermedades comienzan a ser constantes (hace unos días: Consiguen invertir la diabetes usando células madre). Los expertos en alopecia, la caída del cabello apuntan en el mismo sentido. Investigadores canadienses han logrado resultados positivos.
Por primera vez se ha realizado un ensayo clínico con humanos, en el que han participado 19 pacientes de Georgia (EE UU), que ha revelado que la aplicación de una técnica con células madre podría lograr que el cabello volviese a crecer en zonas en las que ya no lo hacía, tal y como ya se había observado en animales.
La técnica consiste en coger parte de la piel del cuero cabelludo en la que no aparece la alopecia, que por lo general es la zona superior de la nuca. Después, se aíslan aquellas células, conocidas como las CSC, que son capaces de regenerar nuevos folículos capilares.
Así, el caldo de cultivo formado con las células aisladas del cuero cabelludo puede inyectarse por debajo de la piel. De esta manera, el pelo puede volver a crecer con el paso del tiempo.