En un llamativo cartel que pende de la puerta de la Guardia del hospital Santa Teresita, de Cerrillos, se le "ruega" a los vecinos ingresar sin hojas de coca.
El debate por la coca sigue abierto.
Más allá de la opinión que le merezca el coqueo a cada persona en particular, al menos llama la atención un cartel que pende de la puerta del consultorio de la Guardia del hospital Santa Teresita de Cerrillos que reza: "Señor paciente, se le ruega no entrar a esta consultorio coqueando", firma: Dra. Siuffi.
Aún más tratándose de un lugar público, en cuyas paredes no se ve cartelería referida a la prohibición de fumar, ingresar alcoholizado al nosocomio o mascando chicle.
Si bien este año el coqueo generó un amplio debate, no existe hasta el momento ninguna prohibición al respecto y este hábito ancestral, muy arraigado en el NOA y en todos los países andinos, continúa siendo legal. Es más, desde esa localidad del Valle de Lerma, el cerrillano y exdiputado nacional Juan Carlos Castiella (UCR) en los años 80 plasmó la cosmovisión de la coca y el coqueo en el artículo 15 de la Ley 23.737, "en el que no se considera la hoja de coca en su estado natural, destinada a la práctica del coqueo o como infusión, como un estupefaciente".
Una vez más, el debate queda abierto.
Fuente: El Tribuno