La Selección cayó 3-0 ante la Azzurra en octavos de final y quedó eliminada en Filipinas. Pese a un buen arranque de torneo con tres victorias, el cruce con el defensor del título resultó letal.
El camino de la Selección Argentina de vóley en el Mundial de Filipinas llegó a su fin este sábado. Tras una fase de grupos perfecta, con tres victorias en tres partidos, el equipo de Marcelo Méndez se topó con un rival de peso en los octavos de final: Italia, actual campeón del mundo y finalista de la VNL. Los europeos mostraron su jerarquía y se impusieron con claridad por 3-0 (25-23, 25-20 y 25-22).
El inicio del partido fue prometedor para la Albiceleste, que con solidez en bloqueo y defensa se puso rápidamente al frente. Sin embargo, la potencia de Michieletto (8 puntos en el primer set) marcó la diferencia y permitió que los italianos se llevaran el parcial por 25-23, pese a los esfuerzos de Vicentín, máximo anotador argentino con 15 puntos.
En el segundo capítulo, el conjunto nacional volvió a mostrar resistencia y hasta llegó a estar arriba en el marcador, pero una racha de 5-0 con protagonismo de Romanó y Bottolo inclinó la balanza a favor de Italia, que cerró 25-20. La historia se repitió en el tercero: Argentina batalló hasta ponerse 17-16 arriba, pero tres aces consecutivos de Romanó sentenciaron el partido con un 25-22 definitivo.
La formación argentina fue: De Cecco (0), Kukartsev (6), Loser (8), Gallego (9), Palonsky (8), Vicentín (15), Danani (L). Ingresaron Gómez (2), Giraudo (0), Sánchez (0) y Armoa (0). DT: Marcelo Méndez.