El defensor uruguayo, quien no es tenido en cuenta por Miguel Ángel Russo, le sugirió a la dirigencia xeneize terminar su vínculo de manera anticipada.
En medio de la profunda crisis futbolística que atraviesa Boca Juniors, Miguel Ángel Russo le comunicó a Marcelo Saracchi y a otros dos futbolistas que no serán tenidos en cuenta. Ante esta decisión, el uruguayo intentó negociar su salida, pero su propuesta fue rechazada de plano por el club.
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A través de su representante, Saracchi planteó la posibilidad de rescindir anticipadamente su contrato, que vence el 31 de diciembre de 2027, pero con una llamativa condición: cobrar un año adicional de salario una vez que se concrete la desvinculación. La propuesta fue rápidamente descartada por el Consejo de Fútbol encabezado por Juan Román Riquelme.
El ex River está dispuesto a resignar un año y medio de contrato para marcharse libre, pero la dirigencia considera que, con 27 años, el defensor todavía tiene valor de mercado. Por eso, se enfocarán en buscar una venta o préstamo con opción de compra. Su representante ya trabaja para acercar una oferta formal en los próximos días.
Mientras tanto, Russo decidió marginarlo del grupo y Saracchi se entrena de manera diferenciada, en una situación similar a la de Marcos Rojo y Cristián Lema, con quienes también se negocian rescisiones anticipadas.
En lo inmediato, el lateral izquierdo seguirá siendo propiedad de Lautaro Blanco, titular indiscutido para el técnico. Como Saracchi quedó al margen, Frank Fabra es la única alternativa disponible. El último partido del uruguayo con la camiseta de Boca fue en el Mundial de Clubes, ante Bayern Múnich.
El próximo compromiso del Xeneize será el sábado 9 de agosto ante Racing, en La Bombonera, donde se esperan varios cambios en el once inicial.
