El abogado defensor del joven, Dr. Guillermo Ruiz Alvelda, aseguró que su cliente intentó contener emocionalmente a la víctima y negó haber ejercido violencia.
Joaquín Cesca, el exnovio de Luciana Torres, la joven que fue hallada sin vida en su departamento en julio de 2024, fue imputado por supuesta instigación al suicidio, según confirmó el Dr. Guillermo Ruiz Alvelda, su abogado defensor, en diálogo exclusivo con El Liberal.
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La imputación se basa en algunos testimonios y en datos extraídos de chats de su teléfono, que para la fiscalía podrían constituir evidencia de violencia psicológica ejercida durante la relación. En la audiencia estuvo presente el juez de control Fernando Paradelo, a pedido del Ministerio Público Fiscal.
Ruiz Alvelda detalló que Cesca declaró ante la Justicia negando los hechos que se le atribuyen y afirmó que, lejos de ejercer violencia, fue quien contuvo emocionalmente a Luciana en múltiples ocasiones durante la relación, que terminó oficialmente en julio del año pasado.
“Era ella quien padecía cuadros depresivos y estaba medicada con clonazepam. La familia tenía conocimiento de ese diagnóstico”, sostuvo el abogado.
El defensor también reconstruyó lo ocurrido en las últimas horas en que la pareja estuvo junta. Según explicó, Luciana habría tomado tres pastillas de clonazepam el día previo a su fallecimiento, mientras se encontraba en el departamento de Cesca.
“Ella le reclamaba a Joaquín que no se hubiera quedado a dormir con ella. Le dijo que quería quitarse la vida. Mi defendido intentó calmarla durante varios minutos, pero ante la insistencia, la dejó ir. Bajó con ella para abrir la puerta del edificio y nunca más la volvió a ver”, relató Ruiz Alvelda.