Las celebraciones por el título del equipo de Luis Enrique en la Champions League derivó en graves disturbios en las calles de la capital francesa.
La histórica consagración del Paris Saint-Germain en la UEFA Champions League quedó opacada por una noche de violencia en las calles de París, donde se registraron disturbios, autos quemados y enfrentamientos con la Policía en medio de la celebración por el primer título continental del club.
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Los incidentes comenzaron minutos antes del pitido final y se intensificaron tras el 5-0 ante Inter, resultado que coronó al conjunto de Luis Enrique como campeón de Europa por primera vez. Mientras miles de hinchas festejaban con euforia, otros grupos protagonizaron escenas de vandalismo en distintos puntos de la capital francesa.
Según informaron medios locales, las autoridades realizaron más de 60 arrestos en el marco de los desmanes, que incluyeron la quema de vehículos y enfrentamientos con las fuerzas de seguridad. La situación obligó a desplegar un fuerte operativo policial para contener los focos de violencia.
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La Torre Eiffel, iluminada con los colores azul y rojo como homenaje al nuevo campeón, se convirtió en uno de los epicentros del festejo, aunque también fue testigo del caos que empañó una jornada que debía ser histórica y festiva para la ciudad.
Las imágenes de coches incendiados y represión policial contrastaron con la alegría del resto de los aficionados, que celebraban con banderas, cánticos y emoción un logro largamente esperado. La Policía continuaba este domingo con las tareas de vigilancia y control para evitar nuevos episodios violentos.
Así, la primera Champions League del PSG dejó una huella imborrable en lo deportivo, pero también una mancha en lo social, con un festejo que terminó desbordado y que reaviva el debate sobre la seguridad en eventos de gran magnitud.