El supermercadista Héctor Ciappino brindó una entrevista a Radio Panorama donde argumentó que se hace "muy difícil llevar adelante la actividad por los aumentos en los costos fijos".
La persistente caída en el consumo preocupa al sector supermercadista. En una entrevista con Radio Panorama, el comerciante local Héctor Ciappino trazó un escenario sombrío para la actividad, afectada por la retracción de ventas y el aumento constante de los costos operativos.
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"La caída en las ventas no ha parado en 18 meses, cada mes es peor que el anterior. Se hace muy difícil llevar adelante la actividad por los aumentos de costos fijos. Es un momento donde todos estamos mal: los supermercadistas, los empleados y los clientes. Es una situación para nada grata", expresó.
Según Ciappino, la actividad en los locales ha disminuido notablemente, sobre todo por la tarde: “Hay mucho menos clientes. Durante la tarde, directamente no hay nadie, a lo sumo tres o cuatro personas, y las mañanas son muy tranquilas. La gente compra lo justo para el día y nada más. Es muy complicado”.
El comerciante señaló que el poder de compra se ha deteriorado en paralelo al aumento sostenido de tarifas y precios: “Cada vez se compra menos. Han aumentado las tarifas y los clientes no han visto mejoras en sus ingresos, por eso deben recortar gastos”.
Además, sostuvo que los incrementos en los precios no se han frenado: “No hay baja de precios en ningún rubro. Se mantienen los aumentos, en algunos casos de forma automática. Lácteos y bebidas suben casi por inercia. Los viajantes ya no tienen ningún argumento. Antes, al menos se justificaba con el precio de la nafta”.
De cara al futuro, Ciappino fue tajante: “La perspectiva no es buena porque si no mejora el poder adquisitivo de la gente, es imposible que suban las ventas. ¿De dónde sino va a salir el dinero?”.
“Algunos proveedores han flexibilizado un poco, permiten pagar a 7 o 14 días. El resto continúa trabajando con pagos al contado. No ha habido demasiadas modificaciones” dijo en cuanto a las condiciones de pago.
Finalmente, respecto a la apertura de las importaciones, consideró que su impacto ha sido limitado en el comercio barrial: “En los supermercados de barrio no ha tenido incidencia, quizás sí en las grandes cadenas”.
