Los jugadores del Real Madrid perdieron el control y reaccionaron ante el árbitro De Burgos Bengoetxea.
La final de la Copa del Rey 2025, que tuvo como campeón al Barcelona, terminó envuelta en un verdadero escándalo tras la reacción violenta de varios jugadores del Real Madrid contra el árbitro Ricardo de Burgos Bengoetxea en los minutos finales del encuentro.
El episodio más grave lo protagonizó Antonio Rüdiger, quien, desde el banco de suplentes, le lanzó una botella y una bolsa de hielo al colegiado, lo que le valió la expulsión inmediata. El hecho ocurrió luego de que el árbitro sancionara una falta de Kylian Mbappé sobre Eric García, cuando el Merengue buscaba desesperadamente el empate. La situación provocó la furia del equipo blanco, que terminó desbordado en el campo de juego.
El defensor alemán tuvo que ser contenido por Ferland Mendy, Jesús Vallejo y un miembro del cuerpo técnico para evitar que la situación pasara a mayores. Incluso, después del pitazo final, Rüdiger intentó nuevamente acercarse al árbitro, pero fue frenado a tiempo por Luis Llopis y Andriy Lunin.
Además de Rüdiger, también fueron expulsados Jude Bellingham y Lucas Vásquez por protestas desmedidas. A la espera del acta arbitral, Rüdiger podría recibir una sanción de entre cuatro y doce partidos, dependiendo de la calificación del Comité de Competición: si se trata como "intento de agresión", la sanción sería más severa; si se considera "actitud violenta", el castigo sería menor.
La situación complica seriamente al Real Madrid de cara al próximo Clásico ante el Barcelona, que se jugará el domingo 11 de mayo y puede ser clave en la definición de La Liga. Actualmente, los Culés lideran con 76 puntos, mientras que el Merengue los sigue de cerca con 72.
