En un ambiente íntimo y despojado, la artista marplatense dejó de lado los artificios de la música urbana para ofrecer una versión cruda y emotiva de la milonga.
Entre charlas informales, guitarras afinadas y un aire de sobremesa dominguera, La Joaqui – la misma que enfrentó críticas, prejuicios y malentendidos a lo largo de su carrera – decidió cantar un tango.
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Pero no cualquier tango. Eligió “Se dice de mí”, ese manifiesto de identidad y desafío que Tita Merello convirtió en escudo y emblema. Y lo hizo en un escenario tan cotidiano como íntimo: el living de Mex Urtizberea, en el ciclo ¡FA!, una suerte de fogón urbano donde la música, las ideas y las emociones se sientan a conversar.
“Se dice que soy fiera…”, entonó la intérprete, con una voz que no pedía permiso ni pedía disculpas. Sin los artificios que algunos le achacan, sin el filtro del autotune, sin la máscara de la performance urbana. Ahí estaba cruda y filosa, como el tango mismo.
Era domingo 13 de abril cuando el video fue subido a YouTube. Hoy, apenas horas después, ya acumula más de 34 mil reproducciones, y una estela de reacciones en redes que parece no apagarse. X (ex Twitter) fue el primer termómetro. “Excelente entonación y métrica perfecta. Sorprendido gratamente”; “Che, la rompió La Joaqui”; “Primera vez que la escucho cantar sin hacer voz de nena”. Lo que para algunos fue un descubrimiento, para otros sonó a confirmación. Un usuario escribió: “No te conozco mucho como artista, pero qué linda interpretación hiciste de esta canción”.
Desde sus inicios, La Joaqui fue blanco de comentarios hirientes. Su estética, su voz, su lírica, su forma de habitar el escenario y las redes sociales. Ella misma lo dijo más de una vez: “La gente asume o me adjudica que porque hago música para divertirme no sé ser pensante”, para luego cerrar: “Soy una persona muy inteligente, lamento decirles”.
Y ahí está. Cantando tango. En el centro de una ronda plural, intergeneracional, sensible. Como si dijera, sin decirlo: sí, se dice de mí muchas cosas… pero ahora escuchen esto. Y lo escucharon.