Después de que la entidad que dirige el fútbol en el país vecino decidiera aplicar una pena por conducta antideportiva al lujo que está de moda, el neerlandés fue muy crítico en redes.
Memphis Depay, delantero de Corinthians, arremetió contra la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) por la reciente modificación del reglamento que sanciona con tarjeta amarilla y tiro libre indirecto a los jugadores que se paren sobre la pelota, una acción considerada como conducta antideportiva. El gesto, que volvió a ganar popularidad en el fútbol sudamericano, fue calificado como “un lujo” por muchos futbolistas y fanáticos.
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El neerlandés de 31 años aseguró que la decisión de la CBF se tomó tras su participación en la final del Campeonato Paulista ante Palmeiras, donde realizó dicha maniobra en los minutos finales del partido que terminó con el Timao como campeón. Aquel gesto desató una batalla campal entre los jugadores de ambos equipos.
"Realmente fui a Brasil para experimentar de primera mano el Jogo Bonito, pero ahora la CBF anunció ayer que ningún jugador podrá pararse sobre la pelota o recibirá una tarjeta amarilla…", expresó Depay en un fuerte descargo a través de su cuenta de X (ex Twitter).
En el mismo mensaje, añadió: "La alegría y la pasión en la forma de expresarnos en el campo no deben tener límites. ¿Quién decide el futuro de este hermoso país futbolístico? Centrémonos en qué reglas pueden mejorar el deporte y no en anuncios tontos".
La medida tomada por la CBF no solo generó controversia por el caso de Depay, sino también por un episodio reciente en el Sudamericano Sub-17, donde Brasil venció 3-0 a Bolivia, pero dos de sus jugadores fueron amonestados por realizar la misma acción, lo que encendió el debate sobre si se trata de una provocación o de una expresión legítima del talento.
Uno de los que se sumó al repudio fue Neymar, quien comentó una publicación de Memphis en Instagram con un contundente mensaje: "El fútbol se está haciendo cada vez más aburrido".
Este gesto también tiene antecedentes en el fútbol argentino, donde Valentín Barco, entonces jugador de Boca Juniors, se paró sobre la pelota en la semifinal de la Copa Libertadores 2023 ante Palmeiras, generando reacciones cruzadas y acentuando el debate sobre los límites del “lujo” y la “provocación” en el deporte.
