El adolescente fue detenido y quedó a disposición de la Justicia de Menores. La fiscal modificó la carátula de la causa a tentativa de homicidio.
Un adolescente de 14 años fue detenido en Salta después de haber irrumpido con un machete en el colegio secundario 5176 de Villa Esmeralda. Luego de que la situación desatara el pánico en toda la comunidad educativa, el joven quedó a disposición de la Justicia de Menores.
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El hecho ocurrió el martes pasado, cuando las autoridades de la institución alertaran a la Policía local sobre la presencia de uno de los alumnos que amenazaba con ingresar al establecimiento armado. “¡Quiere entrar a la escuela, que se acerque personal policial, por favor!“, se escuchó en uno de los videos que se viralizaron en las redes sociales.
Frente al pedido de auxilio, los efectivos se presentaron en la institución para constatar lo ocurrido. Una vez que se emitió una orden de detención en contra del menor de edad, los agentes lo trasladaron junto a su madre, quien había intentado frenarlo sin éxito, según relataron los testigos de lo sucedido.
Según la información publicada por El Tribuno, la causa quedó a cargo de la fiscal Carolina Mateo Bellini, quien confirmó que el adolescente será imputado por el delito de tentativa de homicidio. En un principio, el joven había comenzado a ser investigado por lesiones, amenazas y daños, pero la funcionaria reevaluó la gravedad de los hechos y modificó la carátula del expediente.
A pesar de que las autoridades aclararon que el estudiante sería no punible ante la ley por tratarse de un menor de edad, anticiparon que será sometido a una audiencia de imputación formal. En la misma se establecerán las medidas de protección que se tomará al respecto y el rumbo que tomará la causa.
Según se reconstruyó por medio de los testimonios, la situación habría sido desencadenada por una discusión que el acusado habría tenido con un compañero horas antes. Aparentemente, el imputado habría molestado a una adolescente, por lo que otro alumno le pidió que dejara de hacerlo.
El freno que le habría impuesto el otro joven habría molestado al acusado, debido a que la supervisora general de Educación Secundaria, Claudia Casas, describió que “le habría dicho palabras groseras e, incluso, le habría aplicado algunos golpes en la espalda”.
Después de que transcurriera el recreo, se cree que el adolescente se habría retirado del colegio, para regresar más tarde con el machete escondido en su mochila. “Entre las 10.45 y 11 se produjo esta reacción del alumno de entrar al establecimiento con un machete”, precisó la funcionaria.
De acuerdo con el relato que proporcionaron algunos testigos, el joven ingresó al edificio por un lateral y recorrió los pasillos hasta entrar en un aula. Los estudiantes y profesores, aterrados, comenzaron a gritar, y una docente pidió ayuda desesperadamente.
“¡Su mamá no lo puede detener! ¡Estamos desesperados, está arrinconando a los profesores en la puerta!“, se escuchó en uno de los videos que se viralizaron, en donde se captó el momento en el que el acusado entró a uno de los salones. ”¡Ay Dios mío, se metió al aula!“, continuó la narración, a la vez que se escuchaban los gritos de los alumnos y docentes.
Momentos más tarde, un profesor logró quitarle el arma al joven antes de que llegara la policía, que tardó aproximadamente 15 minutos en arribar al lugar. “Es ahora la Justicia la que debe determinar cómo garantizar el derecho a la educación del menor”, apuntó la supervisora general al agregar que la Asesoría de Menores e Incapaces será la encargada de decidir sobre la continuidad educativa del adolescente.
Como respuesta institucional, se ha implementado un esquema especial para las clases en el colegio, que incluye actividades de contención emocional tanto para estudiantes como para docentes. Equipos de psicólogos y psicopedagogos del Ministerio de Educación ya están trabajando con el grupo afectado, mientras que se están organizando reuniones con los padres para tratar la prevención de la violencia escolar.
El incidente también reveló fallas en el sistema de seguridad del colegio. Aunque el portón del establecimiento está cerrado herméticamente y se controla el acceso mediante un portero eléctrico, la presencia de una sola persona para supervisar el acceso dificulta la respuesta en situaciones de emergencia, según admitió la funcionaria educativa. Las autoridades continúan evaluando nuevas medidas para reforzar la seguridad en el recinto.
Horas después del incidente, circuló un supuesto audio en el que el adolescente amenazaba con futuros ataques. No obstante, las autoridades están investigando la autenticidad de ese mensaje y evaluando nuevas medidas de seguridad para el establecimiento.
