El sospechoso fue detenido en las inmediaciones. En el caso del presunto agresor, un periódico afirmó que en el pasado había presentado problemas mentales.
Un hombre de 41 años y un niño de dos murieron y otras dos personas resultaron heridas en un ataque con cuchillo este miércoles en un parque en la ciudad de Aschaffenburg, en el estado federado de Baviera, en el sur de Alemania.
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En su cuenta de X, la policía de la región de Unterfranken informó de la detención de un ciudadano afgano, de 28 años, en relación con el ataque y agregó que no existe peligro para la población.
"Según la información disponible en este momento, hay dos heridos graves que están siendo atendidos en el hospital. Nuestra investigación sobre las circunstancias concretas de los hechos está en plena marcha. Por favor, absteneos de especulaciones", pidió la policía.
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El ataque con arma blanca se produjo en torno a las 11.45 (10.45 GMT) en el parque Schöntal y el sospechoso fue detenido en las inmediaciones, agregaron las fuerzas del orden, que indicaron que la zona de alrededor de la escena del crimen fue acordonada y que no hay indicios de otros sospechosos.
Descartan que se trate de terrorismo
"Podemos descartar con una probabilidad que roza la plena certeza que se trate de terrorismo", afirmó en declaraciones a 'Spiegel' un portavoz de las autoridades.
Según el diario 'Bild', el niño de dos años muerto en el ataque formaba parte de un grupo de menores de un parvulario y es de nacionalidad marroquí. La publicación señala, además, que uno de los dos heridos graves es también un niño.
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En el caso del presunto agresor, el periódico afirma que en el pasado había presentado problemas mentales. El tráfico ferroviario en la estación del sur fue interrumpido al tratar el sospechoso, aparentemente, de huir por las vías.
El parque en cuestión, con una superficie de nueve hectáreas, fue calificado en noviembre pasado por las fuerzas de seguridad de "lugar peligroso" en algunas zonas, principalmente por casos de robos y agresiones físicas en círculos de la droga, según señaló Frank Eckhardt, jefe de la policía, en declaraciones a la cadena regional BR.