José Contreras dijo que unas 30 casas fueron alcanzadas por las llamas y que tardará un mes en restablecerse la comunicación y la luz.
La población de Epuyén, en la provincia de Chubut, atraviesa horas críticas debido al incendio forestal que ya arrasó unas 2000 hectáreas de bosque nativo.
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Con un saldo momentáneo de unas 200 viviendas evacuadas, alrededor de 30 casas alcanzadas por el fuego, locales incendiados, postes eléctricos quemados y comunicaciones interrumpidas debido a la fibra óptica inutilizada por las llamas, la zona del Lago Epuyén y alrededores vive en total incertidumbre. A esto se suma un futuro climático adverso, sin lluvias, altas temperaturas y vientos de hasta 40 km/h.
Aviones hidrantes, brigadas de Chubut y bomberos voluntarios de la localidad retomaron esta mañana las tareas para combatir el fuego. “Ver cómo quedó el pueblo es lamentable, esto es un desastre. Estamos haciendo un relevamiento de las viviendas afectadas, hay que tomar fuerzas y volverse a levantar”, se lamentó José Contreras, intendente de Epuyén, en diálogo con TN.
El jefe comunal informó que varios sectores de El Lago están incomunicados y que pasaron la noche sin luz. Explicó que tanto el suministro eléctrico como Internet tardará aproximadamente un mes en restablecerse.
Los primeros testimonios de los damnificados por el siniestro (hasta ahora sin víctimas ni heridos) reflejan la tragedia. Sergio Ortega, de 50 años, padre de cinco hijos, vio cómo sus herramientas de trabajo quedaron reducidas a cenizas: “Es la primera vez que me pasa. Recuerdos de la vida... No te queda nada”, dijo a TN, entre lágrimas.
Ortega, quien trabaja desde los 8 años, aseguró que ahora solo le queda intentar volver a empezar. Relató que mientras su casa comenzaba a arder, logró apagarla, pero su fuente de trabajo quedó completamente destruida: “No nos quedó nada”, expresó abatido. Mirando el cielo, sin techo sobre su cabeza, Ortega se preguntó: “No sé de dónde voy a sacar las herramientas”.
En cuanto al incendio, Contreras confirmó que aún no está controlado y que, como cada mañana, el fuego parece aplacado, pero al mediodía resurge con fuerza. “El viento era terrible, no sabías qué dirección tenía y provocó que el fuego se descontrole”, explicó.
Los damnificados que perdieron sus viviendas fueron recibidos en el Gimnasio Municipal de Epuyén, que funciona como Centro de Evacuados. “Yo mismo me autoevacué, vivo en la zona de El Alto, junto a mi madre”, agregó el intendente.
Desde hoy a las 10 de la mañana, el municipio habilitó un puesto especial de atención veterinaria en el Auditorio de Cultura para asistir a los animales heridos por el fuego. Además, informaron que los productores pueden acercarse para solicitar ayuda con sus animales.
Para dimensionar la magnitud del desastre, Contreras explicó que Epuyén tiene dos sectores urbanizados, El Lago y El Alto, separados por una amplia región forestal. “El fuego comenzó en la zona de un pinar de El Lago, hasta donde llegaron los brigadistas, que aún intentan determinar su origen”, detalló.
El incendio avanzó desde Rinconada, atravesando una región forestal, arrasó con todo a su paso y llegó hasta la Ruta 40, donde los equipos trabajan para contenerlo.
El gobernador de Chubut, Ignacio "Nacho" Torres, viajó a Epuyén para ofrecer una conferencia de prensa y evaluar las medidas a seguir. Desde el centro de operaciones, coordinará el amplio operativo desplegado por el gobierno provincial.
Colaboración de distintas ciudades
El municipio de Esquel envió dos camiones hidrantes, mientras que personal de Protección Civil colabora con la organización de operativos y la provisión de alimentos, agua y colchones.
Los Bomberos Voluntarios de El Bolsón habilitaron su cuartel para recibir donaciones, al igual que los Bomberos Voluntarios de Cholila, quienes solicitan barritas de cereal, caramelos, frutas, Platsul y agua para los combatientes del fuego.
La Municipalidad de Esquel anunció la prohibición de hacer fuego en las zonas de uso diurno como Laguna La Zeta, Alto Río Percy y el Parque Nacional Los Alerces debido al alto riesgo de incendios.
El operativo cuenta con 270 personas trabajando entre brigadistas y civiles, con la colaboración del Servicio Provincial de Manejo del Fuego (SPMF) y combatientes de las bases de Epuyén, Las Golondrinas, Cholila, Lago Puelo, Puerto Patriada y El Maitén, además de brigadistas de Esquel, Trevelin y Río Senguer, la Brigada Nacional Sur del SNMF, Parque Nacional Lago Puelo y bomberos voluntarios de Epuyén, Lago Puelo y El Hoyo.