Se trata de un hombre que trabajó como guardia de seguridad en una de las fiestas salvajes que organizaba el rapero.
Por primera vez desde que se desató el caso de Sean “Diddy” Combs una de las víctimas que lo denunció a la Justicia habló en una entrevista y contó en primera persona lo que padeció.
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En un reportaje que le hizo CNN, un exempleado de seguridad que apareció sin mostrar su cara y con la voz deformada para que no se lo identifique relató varias de las situaciones que, aseguran, le ocurrieron en una de las fiestas salvajes de Diddy.
La situación habría ocurrido en 2007, durante una de las fiestas anuales que organizaba el rapero en su mansión de Los Hamptons, Nueva York. De acuerdo a lo que dijo el denunciante, Diddy le habría dado una bebida con una droga conocida como GHB y con éxtasis.
“La primera bebida empezó a tener algún efecto en mí y pensé que era fuerte. No fue hasta la segunda que me di cuenta de que había algo malo. Lamentablemente, Sean Combs estaba esperando y observaba desde una especie de posición privilegiada. Una vez que estuve en una posición de indefensión y él estaba seguro de su poder, se aprovechó de la situación”, lanzó.
Doe, además, denunció que luego de lo que pasó, lo despidieron y lo pusieron en una lista negra. “No volvió a hablar conmigo. Me excluyó de todo. Tuve que buscar otro trabajo”, manifestó.
Cuando se le preguntó qué esperaba lograr con su caso, Doe respondió que nada podría devolverle “la persona que era antes de esa noche”. “Me encantaría verlo pasar el resto de su vida en prisión porque es donde pertenece, donde no puede lastimar a nadie más. Espero que viva una vida muy solitaria y miserable”, cerró.
Diddy está acusado de obligar a mujeres y hombres a cometer, mientras estaban drogados, actos sexuales conocidos como Freak Offs, que quedaban registrados en videos. El rapero continúa preso desde que el 16 de septiembre fue arrestado y enfrenta penas que van, de mínima, desde los 15 años hasta la cadena perpetua.