Con el argentino como titular, los Reds Devils terminaron 1-1 por la Premier League.
La nueva era de Ruben Amorim en el Manchester United comenzó con un empate 1-1 frente al Ipswich Town, equipo en zona de descenso, en la fecha 12 de la Premier League. En un partido donde Alejandro Garnacho tuvo un rol protagónico, los Diablos Rojos mostraron buenas intenciones, pero una preocupante falta de efectividad dejó escapar un triunfo que parecía encaminado.
El encuentro arrancó de manera ideal para el United. Apenas transcurrido un minuto y 22 segundos, Marcus Rashford marcó el 1-0 tras una excelente jugada colectiva que ilusionó a los fanáticos. Garnacho, desde el inicio, se mostró activo en el ataque y generó varias oportunidades, como un remate impreciso a los 17 minutos. Sin embargo, las ocasiones desperdiciadas mantuvieron con vida al Ipswich, que sobre el final de la primera mitad aprovechó su momento.
A los 42 minutos, Omari Hutchinson remató desde fuera del área, y un desvío en Noussair Mazraoui terminó venciendo a André Onana para el 1-1. Aunque el arquero camerunés fue clave con varias atajadas previas, nada pudo hacer en esa jugada. Así, el equipo de Amorim llegó al descanso con sensaciones encontradas tras un dominio inicial que no se reflejó en el marcador.
En la segunda mitad, el United continuó buscando la victoria. Garnacho tuvo una clara oportunidad a los 46 minutos, pero el arquero rival respondió bien. El Ipswich también generó peligro, pero Onana mantuvo el empate con otra gran intervención a los 51 minutos. A pesar del esquema ofensivo planteado por Amorim, el gol del triunfo no llegó, y el debut del técnico portugués terminó con un sabor amargo.
Con este resultado, el United se mantiene en el 12° puesto de la Premier League con 16 puntos, mientras que el Ipswich sigue en zona de descenso con ocho unidades. El nuevo proyecto de Amorim mostró destellos prometedores, pero deberá mejorar en efectividad para aspirar a escalar posiciones en una liga cada vez más competitiva.