Tras los daños en Brasil el equipo apunta al Gran Premio de Las Vegas de Fórmula 1.
Williams Racing dejó atrás los rumores que cuestionaban su presencia en el Gran Premio de Las Vegas tras el complicado fin de semana en Brasil. Con un video publicado en sus redes sociales, la escudería británica mostró el arduo trabajo realizado para reparar los monoplazas de Franco Colapinto y Alex Albon, severamente dañados tras sus abandonos en Interlagos.
El equipo se movilizó rápidamente luego de los incidentes en San Pablo, trasladando los vehículos a su base en Gran Bretaña. Allí, los mecánicos trabajaron a contrarreloj para inspeccionar, reparar y fabricar nuevas piezas en un tiempo récord. Según Ben Howard, jefe de mecánicos, el esfuerzo incluyó jornadas extensas y nocturnas. "Superamos todos los límites posibles para estar listos a tiempo", aseguró en el video.
Un golpe al presupuesto de la temporada
Los daños sufridos en Brasil representaron un gasto significativo para Williams, que alcanzó los 2.3 millones de dólares solo en reparaciones de los autos. El monoplaza de Colapinto acumuló daños en la zona frontal, suspensión y pontones, mientras que el de Albon presentó afectaciones mayores en la parte trasera. Con este incidente, el equipo de Grove elevó su gasto total de la temporada a 9.4 millones de dólares, convirtiéndose en la escudería con mayores costos por reparaciones en 2024.
Desmentida y foco en Las Vegas
A pesar de las especulaciones sobre una posible ausencia en Nevada, el periodista Lawrence Barretto confirmó que Williams tendrá ambos autos listos para competir. "Es un esfuerzo increíble por parte del equipo y sus proveedores", destacó.
El Gran Premio de Las Vegas será una oportunidad de revancha para el equipo. Para Franco Colapinto, la carrera representará su segunda experiencia nocturna y su tercer circuito callejero, luego de Singapur y Azerbaiyán. La actividad comenzará el jueves 21 de noviembre con las prácticas y culminará con la carrera el domingo a las 3 de la madrugada en horario argentino.
Con los monoplazas reparados y la mirada puesta en reivindicarse, Williams buscará en Las Vegas un desempeño que reconozca el trabajo incansable de su equipo y renueve las esperanzas de sus aficionados.