En una entrevista para Diario Panorama, una santiagueña nos contó como vive el día a día después del fenómeno meteorológico.
La DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que azotó la Comunidad Valenciana a finales de octubre de 2024 dejó una huella imborrable y, según el testimonio de una santiagueña residente en Valencia, mostró los desafíos que enfrentaron las autoridades y la comunidad.
Valencia
El 23 de octubre, la AEMET (Agencia Estatal de Meteorología) emitió las primeras advertencias sobre posibles fuertes lluvias y tormentas en Valencia, que se intensificarían en los días siguientes. Sin embargo, la vida continuó con normalidad hasta el 29 de octubre, cuando a las 7:30 hs la AEMET activó un aviso rojo por lluvias intensas. A partir de ese momento, se sucedieron horas de incertidumbre y peligro.
Valencia
A las 12:30 hs, el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat emitió una alerta hidrológica a los municipios, recomendando medidas preventivas. No obstante, el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, en una conferencia de prensa a las 13:00 hs, indicó que el temporal se desplazaría hacia la Serranía de Cuenca y que la situación mejoraría a las 18:00 hs. La realidad fue otra. Alrededor de las 17:00 hs, cuando los valencianos regresaban de sus trabajos, los ríos y barrancos desbordaron sin aviso, atrapando a personas en calles, coches y edificios.
HACÉ CLICK AQUÍ PARA UNIRTE AL CANAL DE WHATSAPP DE DIARIO PANORAMA Y ESTAR SIEMPRE INFORMADO
La activación del sistema de aviso ES-Alert a las 20:11 hs llegó tarde. “Para muchos, la alerta llegó cuando ya estaban atrapados en árboles o con el agua hasta el cuello”, relató la santiagueña. A las 21:03 hs, un segundo aviso se envió a otros sectores, aunque para entonces la DANA había causado inundaciones y dejado a cientos de personas atrapadas o desaparecidas.
Valencia
El 30 de octubre fue un día de caos. Miles de valencianos intentaron colaborar en las tareas de rescate, pero las restricciones impuestas al personal de bomberos y a la UME (Unidad Militar de Emergencias) limitaron su capacidad de ayuda. Los mismos bomberos y militares denunciaron esta situación.
En medio de esta crisis, la santiagueña destacó la solidaridad de los vecinos, que se organizaron rápidamente en puntos de donación para asistir a quienes quedaron atrapados sin acceso a comida ni agua. Sin embargo, la ayuda gubernamental brillaba por su ausencia. El 1 de noviembre, con el número de víctimas en aumento, los voluntarios trabajaron sin descanso buscando desaparecidos y apoyando a los damnificados. Al día siguiente, cesaron las lluvias, y el ayuntamiento puso autobuses para trasladar a los voluntarios, aunque la falta de coordinación generó retrasos.
El 3 de noviembre, la paciencia de los valencianos se agotó. “A las 20:00 hs hicimos un cacerolazo para exigir responsabilidades y la dimisión de Pedro Sánchez y Carlos Mazón”, contó la santiagueña. Los días siguientes han sido de recuperación. Aunque la ayuda oficial es lenta, la solidaridad de los valencianos ha sido constante.
Valencia
A juicio de los habitantes, las diferencias políticas entre el presidente de España, Pedro Sánchez, y el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, afectaron negativamente la toma de decisiones en la crisis, generando una sensación de abandono en la población. Sin la ayuda de los voluntarios, el número de víctimas, que según las cifras oficiales supera las 220 (aunque se cree que es mayor), habría sido aún más alto.
“Promesas incumplidas y rivalidades políticas”, señala la santiagueña, “en lugar de un plan de acción efectivo”. Si bien el fenómeno climático no podía evitarse, los daños materiales y el alto número de víctimas podrían haberse mitigado con alertas y una respuesta rápida. La falta de asistencia expuso a los voluntarios a riesgos como agua contaminada, productos químicos y descomposición, incrementando el riesgo de enfermedades y afectando su seguridad ante aumentos de la delincuencia y saqueos al caer la noche.
Sin embargo, la solidaridad valenciana se ha convertido en un faro de esperanza. “Vecinos, asociaciones y empresas se han unido como nunca”, resalta la santiagueña. Los voluntarios son los verdaderos héroes, quienes a pesar de la tragedia y los obstáculos, continúan apoyando a sus conciudadanos.
Valencia