Osvaldo Granados se refirió en su columna para Radio Panorama al referirse a los datos del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, según los cuales la pobreza alcanzó al 52% de la población en el primer semestre.
Este jueves, en su columna de análisis que se emite por Radio Panorama, el licenciado Osvaldo Granados se pronunció en torno a numerosos temas que hacen a la actualidad política y económica de Argentina.
Con el informe sobre los índices de pobreza e indigencia que el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA reveló ayer como eje central, Granados destacó que "la recesión, la pobreza y la indigencia tocaron piso en el primer trimestre de este año. Los datos son que la pobreza y la indigencia en el primer semestre crecieron muchísimo en medio del ajuste, que fue feroz, y que evidentemente hizo estragos junto a la inflación que en ese momento era muy alta".
"Los índices coinciden con los de la UIA, para ellos el piso de la economía había sido en abril y el rebote era muy débil y por sectores. A qué se debe: en primer lugar bajó la inflación, segundo hubo paritarias y tercero aparecieron las changas, que es el trabajo en negro, y para eso la clase media necesita recuperar su capacidad de compra. Igual estamos lejos con los números de pobreza a indigencia. Hubo un piso, un rebote y se nota que la indigencia bajó. Es heterogénea la recuperación y las paritarias ayudaron al sector en blanco. La recuperación del dólar es clave porque los nervios se alteran fácilmente cuando el dólar aparece en la tapa de los diarios", explicó.
Adelantó además que en agosto la inflación estaría entre el 3,7 y el 4%. "Frente a este panorama hay que ver algunas definiciones, el secretario de Finanzas Pablo Quirno, dijo frente a algunos banqueros que por primera vez se mantuvo a rajatabla un plan sabiendo que estaban en minoría en el Congreso. Tenían que desinflar la deuda del Banco Central, y cuentan con algo favorable, el presidente es economista y el ministro de Economía se ve respaldado porque piensan exactamente lo mismo. En años anteriores teníamos presidentes como Menem y Alfonsín que no eran economistas, eran políticos, abogados, no tenían en claro que era clave tener superávit fiscal. Ahora se cuidan los números y eso ayuda a que el ministro de Economía no sea acosado".
Finalmente destacó que actualmente no existe una dicotomía política en el país. "Antes, la grieta era entre Cristina y Macri. En este momento es Milei en el centro del escenario y los que están en contra y a favor. Cristina está preocupada por la Justicia, quisiera tener alguna injerencia en la Corte Suprema y en el nombramiento de algunos jueces. Lo que no tolera es que alguien le diga que ella lo puso a Alberto Fernández como presidente".