Cerca de las 2 de la madrugada, la Cámara de Diputados terminó aprobando las modificaciones del Senado. Los proyectos no son los originales pero implican profundas transformaciones que le permitirán al Gobierno reformular un estado a su medida.
El Gobierno logró finalmente esta madrugada del viernes tener sus "herramientas”. La ley Bases y el Paquete Fiscal pudieron convertirse en ley, no sin un final agónico en la definición del tema del Impuesto a las Ganancias en el que finalmente el oficialismo mantuvo su texto.
Con una mayoría contundente gracias al apoyo de los bloques de oposición dialoguista, el oficialismo logró que se sancione de manera definitiva la Ley Bases con 147 votos positivos y 107 negativos, mientras que 2 se abstuvieron.
Luego la Cámara baja se abocó a la votación del paquete de reformas fiscales, el cual incluye la restitución del impuesto a las Ganancias, uno de los capítulos del paquete fiscal que el Senado rechazó hace dos semanas. Se aprobó con 136 votos positivos, 116 negativos y 3 abstenciones. Acto seguido se votó la reposición del capítulo sobre Bienes Personales: se aprobó con 134 afirmativos, 118 negativos y 3 abstenciones.
La restitución del impuesto a las Ganancias acaparó la mayor atención por parte del Gobierno, cuyos principales referentes desembarcaron en la Cámara de Diputados al caer la tarde. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei e incluso la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, se apostaron en el despacho de Martín Menem, presidente del cuerpo, para monitorear el debate y rastrear en el radicalismo y en el bloque de Unión por la Patria los votos necesarios.
Finalmente, contrario lo esperado, el oficialismo logró más votos de lo esperado y amplió la diferencia respecto de la votación de la media sanción original, que había obtenido 132 votos positivos frente a 113 negativos. Esto fue el resultado de las ingentes negociaciones que se celebraron durante toda la jornada.