Los "perritos guardianes" del barrio Sáenz Peña, cuentan una hermosa historia con los vecinos
"Los perritos ladran a los sospechosos o a los que intentan robar, están acostumbrados a ladrarles", comenta uno de los empleados de los comercios cercanos en una charla con Diario Panorama.
En el barrio Sáenz Peña, la esquina de las calles Sáenz Peña y Pringles tiene un toque especial y es gracias a unos vigilantes muy particulares: los “perritos guardianes”. Estos canes callejeros, adoptados por la comunidad, se conviertieron en una parte fundamental de la vida diaria de los vecinos.
"El negro, el rubio, el viejo y Sara O'conor", estos fieles amigos de cuatro patas llegan puntuales a su "puesto de trabajo". "Los perritos ladran a los sospechosos o a los que intentan robar, están acostumbrados a ladrarles", comenta Darío, uno de los empleados de los comercios cercanos en una charla con Diario Panorama.
Perritos Guardianes
Los vecinos del barrio adoptaron a estos perros no solo como guardianes, sino como miembros de sus negocios. Se aseguran de que nunca les falte agua, comida y ropa de abrigo. "Sabemos que a la noche duermen en la casa de una vecina y luego salen y vienen a cuidar", agrega el comerciante.
"Todas las mañanas vienen a saludarnos a todos los comerciantes de la zona, después quedan parados vigilando la zona durante toda la mañana y la tarde", explica el empleado.
Lo más conmovedor es la organización y la rutina que han adoptado estos perritos. "Ellos se juntan y están aquí todos los días", menciona el vecino.