Por tercera vez, el fiscal Velasco reclamó la incorporación de las llamadas de la entonces Presidenta de la Nación y Lázaro Báez y el celular de José López.
El fiscal federal Diego Velasco volvió a pedir que se hagan una serie de medidas de prueba para avanzar en el juicio oral por la causa “Los Sauces-Hotesur” en la que la principal acusada es la ex presidenta de la Nación Cristina Kirchner. Tras la reapertura del caso en septiembre pasado, Velasco había solicitado medidas de pruebas -entre ellas, las llamadas de la ex vicepresidente- pero el tribunal oral no las resolvió y ahora las reclamó.
Es el tercer pedido que hace la Fiscalía. El primero fue en septiembre -tras la reapertura del caso cuando la Cámara Federal de Casación Penal revocó los sobreseimientos de los acusados y ordenó hacer el juicio oral- y el segundo el mes pasado. Ante la falta de respuestas del Tribunal Oral Federal (TOF) 5, el fiscal hizo un nuevo planteo la semana pasada, informaron a Infobae fuentes judiciales.
La Fiscalía reclama que a la causa se incorpore nueva prueba. Entre ella, el entrecruzamiento de llamadas de Cristina Kirchner y sus allegados con el empresario Lázaro Báez -también imputado en la causa- que se hizo en la causa de la “ruta del dinero K”. En ese expediente se hizo un trabajo en el que se obtuvo como información que hubo 370 comunicaciones
El fiscal Velasco también reclamó el contenido del celular del ex secretario de Obras Públicas José López que se le secuestró cuando fue detenido en junio de 2016 con bolsos con nueve millones de dólares en un convento de General Rodríguez. El contenido de ese teléfono fue clave en lo que se llamó el “Plan limpiar todo” que expuso el fiscal Diego Luciani en el juicio a Cristina Kirchner por la obra pública en Santa Cruz en la que fue condenada a seis años de prisión junto con López, Báez y otros ex funcionarios. Esas mensajes revelaron comunicaciones entre la entonces presidenta, López, Báez y otros funcionarios sobre cómo actuar con las obras que el empresario recibía para Santa Cruz.
Para Velasco explicó que en la causa “Los Sauces-Hotesur” el celular de López “permitirá analizar y determinar a esta parte la implicancia que tiene el contenido de las diversas comunicaciones que se han detectado desde y hacia esa línea y evaluar su vinculación con los hechos aquí ventilados”. La defensa del ex secretario de Obras Públicas ya se opuso a ese pedido.
La Fiscalía también reclamó que se realicen una serie de operativos en la municipalidad de Río Gallegos en busca de información de propiedades y que se concluyan con los peritajes ordenados en la causa.
En el expediente “Los Sauces-Hotesur” se investiga un presunto lavado de dinero y asociación ilícita de parte de esas sociedades, propiedad de la familia Kirchner, en el alquiler de sus hoteles y propiedades a los empresarios Báez, Cristóbal López y Fabián De Sousa. La imputación es que los alquileres se hicieron como contraprestación a las obras públicas que sus empresas recibieron durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. Junto con la ex presidenta también está imputado su hijo, el diputado nacional Máximo Kirchner.
La causa hoy se juega en dos canchas. Por un lado el TOF 5 y por el otro en la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Y a esas dos canchas se llegó por el siguiente camino.
En noviembre de 2021 el TOF 5 sobreseyó a Cristina Kirchner y al resto de los acusados, entre ellos sus hijos, Máximo Kirchner y Florencia Kichner. Pero en septiembre del año pasado, la Cámara Federal de Casación Penal revocó esa decisión y ordenó que se haga el juicio oral. Con la excepción de Florencia Kirchner para quien Casación si confirmó su sobreseimiento que quedó firme porque la Fiscalía no lo apeló.
Quienes sí apelaron fueron las defensas de los acusados que llegaron a la Corte Suprema para reclamar la absolución de los imputados. Así, el máximo tribunal tendrá la última palabra: si sobresee o si ordena que se haga el juicio oral. La Corte Suprema no tiene plazos para resolver.
En paralelo y ante la decisión de Casación de reabrir el caso, el fiscal Velasco solicitó reactivar la causa. El TOF 5 ya había decidido qué prueba se iba a analizar en el juicio oral. De hecho había ordenado hacer peritajes contables. Pero luego por mayoría sobreseyó a los acusados. Con esa decisión y ante la desvinculación, la causa frenó frenada.
Velasco pidió reactivarla con sus nuevos pedidos de prueba. El fiscal explicó que entre la primera vez que solicitó prueba y la reapertura del caso se conocieron hechos que pueden ser relevantes para su caso, como el celular de López y el plan limpiar todo.
Ahora la decisión es del TOF 5. Para que este caso está integrado por los jueces Adriana Palliotti, José Michilini y Nicolás Toselli. Palliotti es jueza titular del TOF 5 y cuando el tribunal sobreseyó a los acusados ella votó en disidencia al marcar que los planteos que las defensas hacían debían analizarse en el juicio oral. Michilini fue sorteado en reemplazo de Daniel Obligado, también titular del TOF 5, pero que fue apartado del caso “Los Sauces-Hotesur” porque votó por el sobreseimiento y así ya dio opinión del caso. Y Toselli fue sorteado como magistrado subrogante del tribunal oral ante la falta de un tercer titular.
Los magistrados deberán decidir si aceptan la prueba que pidió el fiscal. También está latente la decisión de fijar una fecha de inicio de juicio oral. A fines de enero, Infobae había contado que frente a ese escenario se planteaba el interrogante de si el TOF podía avanzar con la prueba y con el juicio cuando en la Corte Suprema estaba pendiente de resolución el caso.
En rigor, el TOF no tiene ningún impedimento porque muchos juicios comienzan con planteos en la Corte Suprema. Pero acá se da el caso que el máximo tribunal tiene que resolver un caso que tiene fallos contrapuestos. Una mirada general indicaría que el TOF 5 podría avanzar con la prueba y postergar una definición del comienzo del juicio oral hasta tanto la Corte Suprema resuelva. Todo indica también que la Corte Suprema rechazaría la apelación de la ex presidenta. La jurisprudencia del máximo tribunal marca que el fallo de Casación que reabrió el caso no es una sentencia definitiva para que la Corte intervenga.
Todos los escenarios están abiertos.