El canciller chileno, Alberto Van Klaveren, criticó la exclusión de la candidata opositora venezolana María Corina Machado. De esta manera, se alineó a las posturas de Uruguay y Paraguay.
El gobierno de Gabriel Boric volvió a diferenciarse de la Argentina y cuestionó la exclusión de la candidata opositora María
Corina Machado de las elecciones en Venezuela, dejando al descubierto la grieta que existe en la región en torno al chavismo.
El encargado de fijar la posición de Santiago en torno al gobierno de Nicolás Maduro fue el canciller, Alberto Van Klaveren.
En un mensaje en su cuenta de Twitter, el ministro de Exteriores escribió: “Los problemas de la democracia se resuelven con más democracia. Los procesos electorales deben ser libres y justos, sin restricciones ni exclusiones de candidatos y candidatas. Nos preocupan los retrocesos que se observan a este respecto en varios países hermanos de la región”.
En otro mensaje, Van Klaveren afirmó: “Obviamente, me refiero a casos de exclusión administrativa y discrecional. No a sentencias judiciales en países donde impera el Estado de Derecho”.
María Corina Machado fue inhabilitada para participar en las internas de la oposición venezolana previstas para octubre con vistas a los comicios presidenciales de 2024. No podrá ejercer cargos públicos por 15 años.
Qué dijeron los gobiernos de Uruguay y Paraguay sobre Venezuela
De esa manera, Chile se sumó a las fuertes discrepancias que hubo en la cumbre del Mercosur celebrada en Puerto Iguazú el martes sobre la cuestión venezolana entre los socios.
Después de las críticas de Lacalle Pou y Boric a Lula en la reciente cumbre de Brasilia por la presencia de Nicolás Maduro, tanto Uruguay como Paraguay lanzaron fuertes cuestionamientos al gobierno chavista en la cita del Mercosur celebrada el martes en Puerto Iguazú.
Lacalle Pou pidió “alzar la voz” para condenar la inhabilitación de la opositora venezolana María Corina Machado. “De Venezuela no va a salir una democracia sana”, si a “una candidata con un potencial enorme se la descalifica por motivos políticos y no jurídicos”, afirmó.
En tanto, su par paraguayo, Mario Abdo Benítez, denunció las “restricciones políticas” que hay en Caracas y dijo que sigue “con mucha preocupación” los “eventos de los últimos sucesos en Venezuela”.
“El Mercosur tiene que dar una señal clara para que el pueblo venezolano se encamine a una democracia plena que hoy no tiene”, dijo.
Qué dijo Alberto Fernández tras los cuestionamientos de Uruguay y Paraguay a Venezuela
Tras los cuestionamientos de sus pares de Uruguay y Paraguay, Alberto Fernández afirmó: “Nosotros no hemos sido ajenos al tema que es Venezuela. La Argentina dejó el grupo de Lima, por entender que promovía una política de injerencia que no iba a resolver los problemas. La cantidad de exiliados que Venezuela hoy tiene son producto de las sanciones económicas. Lo que intentamos fue ser parte del grupo de contacto, para que Venezuela dialogue”, añadió.
Tras afirmar que acompañó los reclamos por violaciones a los Derechos Humanos que denunció el informe de la ONU elaborado por Michelle Bachelet, señaló que “el problema de Venezuela lo tienen que resolver los venezolanos a través del diálogo entre ellos, no los países metiéndonos en cuestiones internas”.
Además, lanzó un mensaje por elevación hacia Lacalle Pou y Abdo Benítez. “El lugar de plantearlo es en la mesa del diálogo. Sería muy auspicioso que se sumen todos los que desaparecieron de la mesa del diálogo. Está México, Colombia, Brasil y nosotros. Si queremos ayudarlos, sentémonos en esa mesa para que tengan la plenitud de sus derechos”, indicó.