El mandatario brasileño estuvo poco menos de media hora.
La despedida a Pelé que comenzó este lunes, conmueve. Una procesión que tiene un gran recorrido cuya caravana pasará por la casa de la madre del crack desparecido. Pero, el punto más importante de la despedida se dio en el estadio de Santos, donde Luiz Inácio Lula da Silva fue la figura principal en la despedida de los restos de la figura futbolística más emblemática de Brasil.
Sumamente conmovido, Lula se acercó al féretro y lloró. El flamante mandatario de Brasil que asumió por tercera vez el cargo presidencial estuvo acompañado de su mujer, Janja Da Silva, y de una importante comitiva oficial.
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El presidente brasileño llegó al estadio del Santos alrededor de las 9, luego de aterrizar en helicóptero en el cercano campo Portuguesa Santista, según informó Red O Globo, y permaneció cerca de media hora, para los actos religiosos.
En la ceremonia católica de la que participó el mandatario, un sacerdote pronunció una oración para que el alma de Pelé "nada sufra" y ponga rumbo a la "vida inmortal en el reino eterno". "Señor, dale felicidad, luz y paz", afirmó el padre durante el acto religioso.
"La muerte llega para todo el mundo, para los reyes también", manifestó.
Para Lula, este fue su primer viaje oficial dentro del territorio brasileño desde que juró como presidente del país, el pasado domingo, en Brasilia.
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El mandatario, fue una de las últimas autoridades en prestar sus condolencias a los familiares y amigos de O' Rei, previo a la finalización del velatorio, después de 24 horas abierto al público. Una ceremonia por la que pasaron más de 230 mil personas, según los cálculos de las autoridades del club brasileño.
Tras la multitudinaria despedida del astro brasileño, Pelé tendrá un cortejo fúnebre por las calles de esta ciudad brasileña en dirección al cementerio donde será enterrado: un nicho en un cementerio vertical ubicado a unos 700 metros del estadio Vila Belmiro.
Lula despidió a Pelé
El exfutbolista adquirió hace dos décadas un nicho en el Memorial Necrópolis Ecuménica, un cementerio que se eleva en una torre similar en apariencia a un edificio residencial y que ostenta un récord Guiness que lo reconoce como el cementerio más alto del mundo.
El ataúd de Pelé será depositado en un mausoleo personalizado ubicado en la primera planta del cementerio, que en el futuro podría ser abierto a las visitas, según informó el diario A Tribuna.
Pelé murió el pasado jueves en un hospital Albert Einstein de Sao Paulo, víctima de un fallo multiorgánico derivado del cáncer de colon contra el que luchaba desde 2021.
