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La pérdida del olfato por COVID-19 podría durar años en algunos pacientes

Tras la infección por coronavirus, entre 700.000 y 1,6 millones de personas en EEUU sufrieron trastornos en el olfato por más de 6 meses.

25/11/2021

La infección por el coronavirus puede alterar los sentidos del olfato y el gusto. Durante los primeros meses de la pandemia por la nueva enfermedad se desconocía que esa alteración podía ser también un síntoma de la presencia del virus en el organismo humano. Pero la investigación científica avanzó y se está examinando con cuánta frecuencia se produce trastornos del olfato que, en algunos pacientes, continúan incluso después de la etapa aguda de la enfermedad. Es un llamado de atención para el después de la pandemia.

La pandemia provocó una “preocupación de salud pública creciente” con respecto a las personas que pierden el sentido del olfato, según una investigación que fue publicada en la revista JAMA Otolaryngology-Head & Neck Surgery. Los investigadores estiman que entre 700.000 y 1,6 millones de personas en Estados Unidos que se infectaron con el coronavirus han perdido o han sufrido un cambio en su sentido del olfato que ha durado más de 6 meses. Según los autores, que pertenecen a la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis, es probable que esta cifra esté subestimada.

El nuevo estudio sugirió que la mayoría de las personas recuperan su sentido del olfato con el tiempo, pero algunas pueden no recuperarlo nunca. Los autores consideran que esto es preocupante porque, en comparación, antes de la pandemia, sólo 13,3 millones de adultos de 40 años o más tenían lo que los científicos llaman disfunción olfativa (DO) o disfunción olfativa crónica (COD). “Estos datos sugieren una preocupación emergente en materia de salud pública de la DO y la necesidad urgente de investigaciones que se centren en el tratamiento de la disfunción olfativa causada por covid-19″, señalaron los autores del trabajo Amish Khan, Dorina Kallogjeri, y Jay Piccirillo.

No poder oler implica riesgos para la salud. Aunque la pérdida del sentido del olfato a largo plazo puede parecer trivial en comparación con otros síntomas de la infección por el coronavirus, no poder oler puede ser peligroso. En 2014 un estudio descubrió que las personas que habían perdido el sentido del olfato tenían más del doble de probabilidades de sufrir peligros, como comer alimentos en mal estado, que las que sí lo tenían. La pérdida del sentido del olfato también se ha relacionado con la depresión en estudios anteriores.

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