Aunque las más venenosas están prohibidas, la ingesta accidental puede causar serios problemas, especialmente en niños pequeños y animales.
Quizás ya lo sabías, pero mucha gente no es consciente de que la mayoría de plantas que tienes en casa tienen ciertos niveles de toxicidad, a veces más peligrosa, otras veces no tanto. Si bien a las personas adultas no tienen por qué provocarles efectos graves, sí hay que tener cuidado con los niños pequeños y con los animales de compañía.
El jardinero, paisajista y comunicador Carles Herrera confirma que muchas de las plantas que tenemos en casa son tóxicas, pero que esto no debe preocuparnos porque tanto nosotros, como los niños pequeños y los animales de compañía tenemos unos "sistemas de seguridad" naturales que evitan que nos envenenemos.
"Los niños pequeños son una población de riesgo, pero la toxicidad dependerá de la cantidad que ingieren. De todos modos, lo que habría que hacer si hay niños pequeños es mantener las plantas en un lugar donde no puedan llegar, como ya se hace con otros objetos delicados", avisa Herrera.
Por suerte, no hay ninguna que tenga un sabor ni textura agradable, que pudiera hacer que un bebé acabe ingiriendo una cantidad peligrosa.
La familia de las diefembaquias es muy variada. Es una planta tropical que, masticada, puede causar náuseas y vómitos, inflamar las cuerdas vocales y te puede dejar sin voz. También provoca irritación en la boca e hincha la lengua, aparte de los problemas estomacales que causa. En los casos más graves puede dificultar la respiración.
A pesar de que es una planta apreciada porque sus hojas son muy visibles, todas las partes del croton son ligeramente tóxicas. La ingesta puede provocar problemas gastrointestinales tanto a personas como a animales. Además, la savia blanca que produce es irritante, por lo tanto, nos produciría escozor en la boca.
croton
Tanto el ficus de hoja grande como el de hoja pequeña (benjamina) producen un látex que, en contacto con la piel puede provocar irritaciones y reacciones alérgicas. De hecho, el ficus se le conoce como el árbol del caucho, y no nos imaginamos tomando un batido de goma líquida, por muy natural que sea.
ficus
"Sí que puede llegar a ser tóxico, pero en cantidad", reitera el experto. "A veces he cortado alguna hoja, me he ensuciado el dedo con el látex y lo primero que hacés es limpiarlo porque está sucio. Ahora bien, si agarrás un ficus y lo masticás un rato... ahí sí tendrás un problema".
Si salimos al patio o al jardín nos podemos encontrar con una planta que es muy popular pero que, por ejemplo, en Francia está prohibida. La hortensia se ha llegado a utilizar como alternativa a la marihuana, por el poder psicotrópico de las hojas. Pero alerta: es letal en dosis elevadas. Aunque puede producir los mismos efectos que el cannabis, consumida en exceso puede llegar a provocar la muerte.
Hortensia (Hydrangea)
Las Adelfa son las reinas de muchos jardines. Son unas plantas exuberantes de hoja oscura y estrecha, parecida a la del laurel, y con flores vistosas. Se puede leer en muchos medios que es una planta muy venenosa, incluso mortal, pero Herrera tranquiliza: "Tienen muy mala fama pero tampoco son tan graves: principalmente provocan diarrea".
También hay que tener cuidado con el tomate enano (Solanum pseudocapsicum), los potos (que pueden ser tóxicos para los animales de compañía), la hiedra y el espatifilo (Spathiphyllum), entre otros.
Adelfa (Nerium oleander)
Herrera aclara que las plantas más venenosas están prohibidas y que de las que podés llegar a tener en casa, ninguna de ellas es mortal. De todos modos, el experto insiste en que todo depende de la cantidad: "Una aspirina no te hará nada, pero si te tomás un frasco te hará mal. Con las plantas es lo mismo", ejemplifica.
"Y en cuanto a los animales, son lo suficientemente inteligentes para que no les afecten lo más mínimo. Ellos ya saben qué plantas son, porque emiten una serie de olores que los ponen en alerta rápidamente. Ya no les hacen ni caso".