Amarse en tiempo de redes y pandemia: la historia que unió a una santiagueña y un francés

Las nuevas generaciones que se criaron al calor de las tecnologías de la comunicación comprenden la comunicación de una manera diferente, perciben los lazos sin necesidad de buscar exclusivamente la presencialidad. Esta realidad se suma el contexto de pandemia que dificultó las posibilidades de disfrutar de la presencia del otro.

A pesar de todas las situaciones que se fueron dando, algunas a favor, otras en contra, Milagros Sandez y Clément Chevauchey pudieron concretar su historia de amor.

Vacaciones.

Ella es santiagueña oriunda del barrio Huaico Hondo, él pertenece a la capital del vino francés como lo es Borgoña. Se conocieron en 2018 en un grupo de adolescentes de diversas nacionalidades que ponían a prueba el manejo de la lengua inglesa a través del dialogo.

Fue de esta manera que conectaron no solamente desde la redes sociales si no también en sus cuerpos sentían una conexión más que especial.

Primer encuentro.

A medida que los mensajes comenzaban a intercambiarse y el tiempo pasaban se hicieron compañeros y cómplices de lo que estaban viviendo, fue así que un día decidieron ponerse de novios a distancia.

La feliz pareja disfrutando de París.

Motivado por las ganas de apreciarse cara a cara, Clément toma un vuelo, o varios, para llegar a Santiago del Estero un diciembre del 2019. Al calor de la Madre de Ciudades los jóvenes se estrecharon en un profundo abrazo en el aeropuerto de esta Capital. Finalmente el sueño de ambos se hacía realidad, pasaron Navidad y Año Nuevo juntos hasta que llegó el momento de armar las valijas, Milagros y Clément se fueron a Francia, allí con un hermoso paisaje de fondo él le propone matrimonio, ambos dieron el primer paso y celebraron un acuerdo prematrimonial.

Matrimonio en Francia.

Pandemia del coronavirus

El mundo entero se confina como medida para resguardarse por el avance de los contagios. Las ciudades parecen vacías y los aeropuertos cierran sus puertas. Este panorama angustió a los jóvenes que se encontraban en la incertidumbre de no saber cuando se volverían a ver.

Los meses avanzaban y con ello las restricciones, lo cual hacía más difícil ese encuentro. El no saber que iba a pasar hizo que Clément decida arrojar certezas a su futuro con Milagros, con su dinero ahorrado decide dejar su vida en Francia para volver a esta provincia y construir su presente junto a la santiagueña que lo enamoró. Hoy caminan felices tomados de la mano por la ciudad, se disfrutan cada día. Apostando a su futuro ambos comenzaron a estudiar en la Universidad Nacional de Santiago del Estero. Apostando al amor en mayo se darán cita en el Registro Civil para dar el sí.

De paseo por el norte argentino.

Hacer frente a los desafíos, las adversidades y una pandemia serán las anécdotas de esta feliz pareja que dejaron en claro que en los momentos más difíciles lo único que nos salva es el amor.