Este animal convive con una manada de jirafas comunes.
En marzo de este año, cazadores furtivos mataron a la madre de esta jirafa blanca convirtiéndola en el último ejemplar que queda sobre la Tierra.
"Este es un día muy triste para la comunidad de Ijara y Kenia en general. Somos la única población del mundo que custodia la jirafa blanca", decía en aquel momento Mohammed Ahmednoor, gerente del parque Ishaqbini Hirola.
"Sus muertes son un duro golpe para los enormes pasos dados por la comunidad para conservar especies raras y únicas y un llamado de atención para un apoyo continuo a los esfuerzos de conservación", agregaba.
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Debido a que es el único ejemplar que queda en el mundo, cuando un fotógrafo logró captarla, la imagen se volvió viral rápidamente. Actualmente, el animal vive en el área de Conservación Ishaqbini Hirola en Kenia.
El motivo por el que el pelaje de esta jirafa es blanco se debe al leucismo, un problema en la pigmentación en las células de la piel.