El intendente de Lomas de Zamora continúa internado y recibiendo el tratamiento correspondiente en el Hospital Lavallol.
El intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, contagiado de COVID-19 e internado desde hace más de 10 días, se refirió hoy al tratamiento con plasma al que se sometió para mejorar estado de salud. “Anoche pasé mi mejor noche. Me siento bárbaro, la capacidad pulmonar está bárbara, con oxigenación y ningún dolor de garganta ni muscular”.
“Hoy me siento bárbaro. Tengo una capacidad pulmonar bárbara. Con oxígeno, sin dolor muscular y sin dolor de garganta. Estoy un poco colorado por los corticoides, pero estoy bien”, indicó en diálogo con el programa “La Peña de Morfi”. El jefe comunal se refirió al tratamiento con plasma que le hicieron en la semana y contó que su evolución fue positiva 24 horas después. “Estoy feliz porque creo que esta lucha valió la pena”, sostuvo.
Insaurralde explicó que “el miércoles fue un quiebre de la enfermedad” porque “se me había reducido la capacidad pulmonar”. “Me llegó el plasma, me hicieron una pequeña intervención quirúrgica para pasármelo porque yo no tengo buenas venas”, señaló.
En el parte médico previo al tratamiento con el plasma, desde el Hospital Lavallol, donde se encuentra internado, informaron que al momento de disponer el procedimiento se verificó que “el paciente no tiene acceso venoso periférico, como consecuencia de la quimioterapia a la que fue sometido en 2011″. Y agregaron “por este motivo los cirujanos Martín Parodi y Diego Pintos le colocaron quirúrgicamente una vía central bajo guía de ecografía”.
“La combinación del plasma con los corticoides me dio mayor oxigenación, me desinflamó la parte bronquial y me bajó la carga viral”, contó el intendente lomense, que aclaró que 24 horas después de realizar al tratamiento ya se sentía mejor.
Durante un tramo de la entrevista que le realizó Gerardo Rozín, le envío un mensaje a la sociedad. “Esto le puede pasar a cualquiera. Tomé todos los recaudos necesarios. Por mi actividad tenía roce con mucha gente. Esta batalla es la que muchos están dando en Argentina. Hasta que no haya una vacuna hay que cuidarse”, afirmó.
“No tengo palabras de agradecimiento para el equipo de médicos y enfermeros. Que me atiende a mi y a cientos de personas en todo el país”, dijo Insaurralde, emocionado, sobre la atención que recibió. Además, le agradeció al ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollán, por ponerse a disposición durante los 11 días que lleva internado.
El dirigente peronista le agradeció a su familia y contó que sus hijos le enviaron un desayuno por el día del padre. “Tengo una familia hermosa y no tengo más que palabras de agradecimiento en este momento”, aseguró. Luego, agregó: “Siento a mis seres queridos adentro de esta habitación. Ojalá que en 48 o 72 horas me pueda ir porque se está haciendo largo y comienza a ser angustiante”.