El joven trató de evitar su arresto y huir de un negocio donde había provocado incidentes. Debieron intervenir tres policías para poder colocarle las esposas.
La cámara de un patrullero registró el incidente donde se vio involucrado un jugador de fútbol universitario y tres policías, uno de los cuales fue levantado por el jugador y luego lo arrojado sobre la calle.
El incidente ocurrió en un comercio de la ciudad de Grove, Ohio – Estados Unidos, cuando alertaron a la policía sobre la presencia de una persona, que luego identificaron como Michael Harris, que realizaba disturbios y se mostraba agresivo.
Cuando concurrieron al lugar los uniformados parecen intentar dialogar con el joven, pero tras un cruce de palabras el joven intenta marcharse y los uniformados se lo impiden. Luego de unos empujones y golpes, Harris reacciona levantando con ambos brazos a uno de los uniformados, a quien arroja con violencia al suelo.
Harris enfrenta un cargo de delito grave de asalto y delitos menores de resistir el arresto, obstruir a oficiales y conducta desordenada mientras estaba intoxicado.
La policía encontró pastillas dentro del auto de Harris, pero aún no las han identificado. Los oficiales involucrados en su arresto no resultaron heridos.