La modelo se descargó con sus seguidores sobre una parte de su personalidad que no le gusta y quiere cambiar para este año.
Existen dos tipos de personas: las personas que hacen de su casa un templo que brilla y de su ropero una paleta de colores, ordenando cada prenda por tono y categoría, y otras que viven en medio del caos. En este segundo team se enmarcó Barbie Vélez tras una sincera confesión que hizo a sus seguidores en Instagram, luego de que regrese de viaje y vea su casa "patas arriba".
"Hola amigos, como están?", comenzó la hija de Nazarena Vélez, a fin de saludar a la gente que la sigue paso a paso en sus redes sociales y con quien tiene un fluído ida y vuelta. "Les quería contar que estuve un poco desaparecida porque acabo de llegar a Buenos Aires hace dos días, tenía que hacer un par de cosas y encargarme un poco de mi casa que la tenía hecha un desastre”, descargó la modelo con su fandom digital.
¿A quien nunca le pasó, no? Hay veces que el caos de tu casa se iguala al paisaje que queda cuando un huracán arrasa todo o peor aún, los famosos mini sillones en los que se apila la ropa usada del día y al cabo de un tiempo, es lo más parecido a un jenga. Lo cierto es que, a corazón abierto y por esta misma causa, puso en voz alta un objetivo que se planteó para que este año no le pase más y mejorar: "Este 2020 me propuse ser un poco más ordenada. Yo soy bastante desordenada, bastante, bastante y de a poco lo voy logrando. Va poco tiempo, recién, pero espero que me dure mucho. Yo acumulo bastante, como que me da cosa tirar las cosas, entonces, empezé a deshacerme un poco de ellas. Esta bueno”, cerró la ex de Federico Bal.
Para quienes se encuentren en la misma situación que Barbie y no sepan por donde arrancar, hay un método que proviene de una famosa japonesa llamada Marie Kondo, el cual consiste en ordenar en vertical y por color. Los japoneses, son precursores en la materia y sostienen que hay 5 reglas a seguir para lograr una armonía en el orden de tus pertenencias y tu hogar: no llenar los espacios al máximo, tirar lo que no te hace feliz, no poner nada en cajas y bolsas, colgar y guardar todo en vertical, dado que aporta sensación de equilibrio, armonía y te permite ver lo que tenés y no acumular.
Quizás por estas listas, técnicas y consejos, es que los japoneses son considerados minimalistas y concretos. Tienen y viven con lo justo. Tiran lo que está en mal estado, dan o regalan lo que no usan pero sirve y de esta manera, renuevan sus objetos y su espacio, por ende, psicólogicamente también les repercute en su estado de ánimo y visión de las cosas. ¿Te animás a probarlo? Barbie ya empezó.