El milagro sucedió 30 días después de un violento robo que dejó en estado vegetativo a la mujer de 43 años.
María Laura Ferreyra sufrió un violento robo el pasado 25 de octubre en la localidad de San Francisco, Córdoba. Tras ser golpeada en la cabeza por los delincuentes, se le produjo un hematoma en el cerebro que la dejó en coma y luchando por su vida, en estado vegetativo.
Después de 15 días, un estudio de tomografía computada demostró que María Laura, mamá de tres niños, tenía actividad neurológica y su pronóstico se volvió más alentador.
El verdadero milagro ocurrió el pasado domingo, un mes después del intento de asalto que casi le quita la vida.
Durante una de sus visitas, la más pequeña de sus hijas -que aún amamantaba al momento de la tragedia-, se acercó a María Laura reproduciendo con la boca el sonido con el que solía comunicarle que tenía hambre.
El instinto materno traspasó las barreras de la conciencia.
"La mamá se levantó la bata y le dio la teta", expresó emocionado Martín Delgado, marido de María Laura.
Aunque María Laura aún no está consciente, su marido asegura que reconoció a su pequeña ya que la vieron replicar todos los gestos y caricias que le daba a su bebé antes de entrar en coma.
La esperanza de una familia que vivió un mes paralizada por la tragedia crece y emociona a una ciudad entera, más allá del largo proceso que deberán enfrentar juntos para intentar recuperar a la mamá que les arrebataron.
"De ahora en más empieza todo lo bueno, va a poder estar con sus hijos", concluyó Martín.