El Presidente, que busca la reelección, cumple este sábado con la veda en la quinta Los Abrojos.
A horas de la elección en la que Mauricio Macri pone en juego su continuidad al frente del Gobierno, el Presidente cumple con la veda en la quinta Los Abrojos, en Malvinas Argentinas, en compañía de su mujer, Juliana Awada, y la hija de ambos, Antonia.
Según informó Clarín, el mandatario almorzó en familia y a pesar de los dolores en su rodilla jugó al paddle con amigos.
Permanecerá en esa casa de fin de semana hasta el domingo al mediodía, cuando saldrá para Capital a votar.
Está previsto que el Presidente emita su sufragio en la Escuela N° 16 Wenceslao Posse, a una cuadra del Parque Las Heras, en Palermo.
Después volverá a la residencia presidencial de Olivos, a esperar los primeros resultados de la jornada y trasladarse más tarde al búnker de Juntos por el Cambio.
En el inicio de la veda, el viernes, Macri siguió su rutina desde la casa de Olivos, como siempre, y se sumó a la reunión de los equipos de comunicación que lideraron el jefe de Gabinete, Marcos Peña, junto al asesor ecuatoriano Jaime Durán Barba y su socio Santiago Nieto.
El mandatario aprovechó el encuentro para felicitarlos por el trabajo de las últimas semanas.
Por su parte, el candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández, sí se lo vio en público. Este sábado fue a desayunar a un bar de Puerto Madero, donde vive, junto al primer candidato de la lista de diputados bonaerenses, Sergio Massa.
Por la tarde, y después de almorzar en la casa de Daniel Filmus, Fernández tocó la guitarra con su amigo Gustavo Santaolalla.