La hija de La One no tuvo una linda experiencia probando la famosa copita y no dudó en manifestarlo en sus redes.
No es la primera vez que Sofía Gala comete un sincericidio con sus palabras. Filosa como su mamá, la hija de La One contó a través de sus redes sociales que se compró una copa menstrual y que el resultado no fue lo que esperaba. "Acabo de intentar ponerme una copa menstrual y quiero decir...", arrancó en sus historias de Instagram, donde tiene más de 291 mil seguidores.
La catarsis de Sofía, que por estos días está en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián (donde fue convocada para ser jurado), continuó sin filtro y con lenguaje inclusivo. "Acabo de intentar ponerme una copa menstrual y quiero decir que odio a todes les que me la recomendaron. Ahora no solo estoy manchada con mis litros y litros de sangre sino que también estoy frustrada y enojada", siguió la actriz. Finalmente, con un poco de humor, remató: "Hippies horribles (encima me salió un huevo) la vendo".
Hace unos días, la actriz subió un par de fotos (una antes de la gala y otra después) y le llovieron las críticas. Algunos, por su extrema delgadez, la tildaron de anoréxica. Como suele suceder, su mamá salió a defenderla vía Twitter y no se calló nada. "Sofía es sana: siempre fue delgada y trabaja porque le encanta y la llaman los mejores directores de Teatro y de Cine. Quédense tranquilos y no se ocupen ni preocupen por los demás", arrancó la conductora de Incorrectas (América).
A lo mamá leona, Moria Casán le puso un punto final a los haters con un lapidario tuit. "Como seguramente no les da la mononeurona para comprarse una vida por lo menos alquílense una piecita al fondo a la derecha", escribió La One quien, a pedido de su hija, quedó a cargo de sus nietos -Helena de 9 años y Dante de 4- hasta fines de septiembre, momento que coincide con el regreso de Gala Castiglione de España.