El mediocampista de Boca quiso controlar la pelota tirándose al piso, pero terminó dándole en el estómago a su compañero.
El Romano es así. Juega al límite, va mucho al piso y es su sello, más allá de su claridad y de su oficio.
En este caso, por su ímpetu, le dio un planchazo ¡a Goltz! De Rossi fue al piso con la pierna alta para tratar de rechazar un pelotazo largo, se deslizó y no vio lo que había: le dio con la pierna alta al central, que venía de frente. Por suerte quedó ahí, no pasó nada y el defensor no se lesionó.
Pasó inadvertida la jugada en medio del partido, justamente porque el juego siguió rápido después de una falta inmediata por la derecha y no hubo lastimados.
Fuente: Olé