El presidente norteamericano se arrepiente de haberle exigido a Fred Jr. que se ocupara de los negocios familiares. El mandatario aseguró que su experiencia lo ayuda a entender el problema de la adicción y guía los esfuerzos de su Gobierno por combatir la epidemia de opiáceos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lamenta la presión que ejerció sobre su hermano mayor, Fred, quien quería ser piloto en lugar de llevar la empresa de la familia y que murió alcoholizado en 1981, a los 43 años, según una entrevista que publica este jueves el diario The Washington Post.
Esa experiencia, dijo Trump, quien es abstemio, inspira su comprensión actual del problema de la adicción y guía los esfuerzos de su administración por combatir la epidemia de opiáceos que mata a decenas de miles de personas cada año en Estados Unidos.
A mediados de la década de 1960, cuando el ahora presidente ya se ocupaba de los inventarios y la contabilidad del conglomerado empresarial que regenteaba su padre, su hermano Fred soñaba con ser piloto de la aerolínea TWA.
"Vamos, Fred ¿qué haces?", preguntó Donald a su hermano cuando lo encontró leyendo revistas de aviación. "Estás perdiendo tu tiempo".
Fred Trump, el patriarca de la familia se burlaba de que su hijo "no quería ser más que un chófer en el cielo" en lugar de administrar los negocios familiares, según dijo al Post David Miller, miembro de la misma hermandad universitaria de la que era miembro el joven Fred y quien luego fue su abogado. Fred Jr. era el hijo mayor de la familia y su padre anhelaba que todos sus hijos se involucraran en los negocios de la empresa.
Ahora, cuando el presidente Trump habla sobre cómo enfrentar la crisis de opiáceos, menciona la historia de su hermano como prueba de su empatía con los adictos, y dice que puede aplicar las lecciones de esa experiencia para encarar el desastre del abuso de las drogas, señala el Post.
Fred Trump, diez años mayor que Donald, murió a los 43 años de un ataque cardíaco debido al alcoholismo, y su larga lucha contra la adicción generó en Donald una aversión al tabaco y al alcohol.
"Yo lamento haberlo presionado (…). Los negocios de la familia eran algo que él jamás quiso hacer. No era lo suyo. Creo que el error que cometimos fue presumir que a todos les gustaría eso. Ese fue el error más grande", declaró el gobernante al diario.
"Lo que él amaba en la vida era pilotar aviones", añadió. "Recuerdo que estábamos en la casa, y otros pilotos de TWA venían a trabajar con Fred porque él tenía un talento muy natural".
Fred fue despedido de TWA un año después de su contratación a prueba, y Bob Kavula, vicepresidente de la Asociación de Pilotos Jubilados de TWA dijo que el motivo fue su "problema con la bebida".
Según el Post, varios amigos de Fred han dicho que el presidente ha contado muchas veces la historia dejando mal a Fred y presentándose como el hermano virtuoso que evitaba el alcohol. Esos amigos han descrito a Fred como una persona con un carácter muy distinto al de Donald, un individuo que hablaba con tono mesurado, divertido y amigo de las bromas.
Annamaria Forcier, otra amiga de Fred, cree, en cambio, que el joven dejó TWA por las presiones de su familia."Mi impresión era que él, básicamente, fue forzado a ir a trabajar con la familia", dijo. "Había mucha tensión. no solo con el padre, sino, también, entre Fred y Donald. Mucha tensión porque no querían que él fuera piloto de aerolínea", añadió.
Trump aseguró que la vida breve y trágica de su hermano "le dejó cicatrices únicas", aseguró el Post.