El joven que ahora tiene 18 años pasará el resto de su vida en la cárcel por asesinar a su hermana. Le apretó el cuello durante 10 minutos.
Kevon Watkins era un adolescente de 16 años cuando estranguló a su hermana durante diez minutos, matándola delante de su madre, según el medio inglés Indepent.
La familia de Watkins vivía en el estado de Georgia, en Estados Unidos. El crimen ocurrió a raíz de una pelea familiar.
La madre del sentenciado, Latoya Watkins, testificó que su hijo estaba de mal humor cuando lo recogió aquel día del instituto, el viernes 2 de febrero del 2018. Más tarde, el chico cambió la contraseña del Wi-Fi de casa porque la conexión era lenta debido a la cantidad de personas que lo estaban usando a la vez, lo cual no le permitía jugar como quería a un juego de la Xbox.